“El byte debe costar igual a un pobre que a un ricachón”
Una artista y activista del 15-M en Barcelona defiende un Internet libre y neutral para todos
Todavía enfrascada en una reunión que tiene que ver con el Movimiento 15-M, Simona Levi (Turín, 1966) pide los cinco minutos que quedan antes de la hora pactada para la entrevista. A las 18.30 en punto está ya sentada en una silla de plástico negra en la sede de la compañía de teatro Conservas. “Aquí se grabó el vídeo de la manifestación del 15 de mayo”, cuenta esta activista y artista italiana. “Pero yo no participé en la gestación del movimiento”, insiste.
Levi supo del 15-M en febrero a través de plataforma eXgae (hoy X.net para evitar una demanda de la SGAE por la similitud del nombre), que propone modelos alternativos para la gestión de derechos de autor. Tres semanas antes de la primera manifestación, decidieron “apostar y ayudar activamente”. Pero “diluyéndose” como individuos en la masa. Nada de grupos. Levi se involucró en la comisión de Mínimos en la plaza de Catalunya de Barcelona. Ocho horas al día, durante un mes, hasta que salió el primer documento con propuestas claras del 15-M.
* Internet libre, neutral y universal. El 15-M se moviliza a través de Internet. “Es un agujero que ha pillado al poder por sorpresa”, asegura Levi. Pero teme que no durará para siempre. “El enemigo tiene tiempo y dinero para organizarse” y ocupar ese espacio, augura la activista. Por eso defiende con vehemencia la igualdad en la Red. “El byte debe costar igual a un pobre que a un ricachón”.
El cobro en función del uso de Internet es un despropósito, según ella. “El día que alguien pueda pagar más que otra persona por la información en la Red se habrá roto la neutralidad”, afirma. Y entonces, interpreta Levi, Internet será como la televisión, con una oferta privada, donde el que más dinero tenga podrá dirigirse a más gente.
Su segundo caballo de batalla se centra en el intercambio de información y cultura en la Red. Niega las trabas legales por los derechos de autor, y defiende una repartición de beneficios más equitativa. “Si a Brad Pitt le pagasen un poco menos tampoco pasaría nada, y se podrían distribuir y diversificar mejor las posibilidades entre el resto”. “Hay que reducir la burbuja del contenido, que es igual que la de los bancos o la del ladrillo”, considera.
Levi, además, pide la derogación de la Ley Sinde, contra la que ha luchado desde el principio. “Es injusta porque no respeta la presunción de inocencia”, se queja, sobre la posibilidad de que se bloqueen webs de descarga de contenidos ilegales sujetos a derechos de autor. La norma “condena el desarrollo tecnológico y empresarial de un país”, sentencia.
* El 15-M y el 20-N. “Deberíamos ser capaces de impedir que los partidos sigan beneficiándose de la farsa de la representatividad”, dice. Por eso espera que el 15-M logre hackear las elecciones. “Que los números no les salgan como tienen previsto”, pide. Levi cuenta sin contar, porque está previsto que el movimiento lance hoy una campaña en Twitter con ese mensaje. “En cada circunscripción hay un partido fuerte que puede estorbar”, apunta, en referencia a partidos como PNV o UPyD. “Les tengo el máximo desprecio porque han podido hacer las cosas bien y no han sido capaces. Pero votándoles podemos hacer daño”. No duda de la victoria del PP, pero espera que no obtenga mayoría absoluta. “Al menos vamos a intentarlo”.
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