Nuestros hijos no son números rojos

¿Por qué no se investigan las enfermedades raras? La mayoría de ellas no tienen ningún tratamiento, porque ni a las farmacéuticas ni al Estado le sale a cuenta invertir dinero en investigación cuando son pocos los afectados. Es triste que vean en nuestros hijos solo números. Mi hija es el número siete para ellos: siete personas en España viven con el síndrome de IRF2BPL, una rara enfermedad degenerativa. Cuando son pocos, parece que no existen, no son tomados en cuenta. Somos números rojos para ellos, somos pérdida de dinero. ¿Qué pasaría si te dijeran que tu hijo tiene una enfermedad degenerativa grave? ¿Lucharías por buscar una solución, un tratamiento o seguirías pensando que son solo siete? Esos siete niños, para nosotros los padres son nuestro todo; no son números, no valen menos sus vidas. Cuando veas a una madre o a un padre luchando por dar visibilidad a la rara enfermedad de su hijo o hija, apóyala, escúchala, comparte su historia. Recuerda que lo que para ti es un número para esa persona es su hijo, es su vida. Nuestros hijos no son números rojos.

Paola Manríquez. Barcelona

Señores que aún no entienden de qué va esto

Soy maestra y sé que cuando mis alumnos vuelvan al aula, hablaremos de Rubiales. Debatiremos también la conveniencia del masaje testicular como forma de celebrar goles y buscaremos alternativas. Partiremos de esta lista: cuando metas gol, tócate la cabeza, tienes un cerebro rápido y eficiente; masajéate las piernas, felicita a tus músculos; comparte la emoción en equipo... No hace falta tocar culos, tetas ni dar picos; basta con un abrazo o un guiño amistoso. Sé que mis alumnos de primaria lo entenderán y aportarán buenas ideas. A muchos señores, me parece, les va a costar un poco más.

Estela González Muntión. Logroño

Desmontando sandeces

Henchido de santa legitimidad y mientras se le cae la baba fantaseando con la quimera del poder, Elías Bendodo sostiene que “en este país siempre ha gobernado quien ha ganado las elecciones”, al tiempo que teje la inquietante urdimbre de otros cuatro años más de Gobierno ilegítimo y Frankenstein. Su razonamiento, al margen de no respetar la Constitución, se desmonta así de fácil: ¿por qué entonces, el PSOE ganó las elecciones en 2019 con más de 1.745.000 votos por encima del PP —ahora el PP le ha sacado solo algo más de 330.000— hemos tenido cuatro años de Gobierno ilegítimo, okupa, traidor, felón, mentiroso, Frankenstein y otras bajezas, como el bloqueo constitucional e institucional? Es lo que arrastran: su creencia de que solo ellos tienen derecho a gobernar “por la gracia de Dios”.

Miguel Fernández-Palacios Gordon. Madrid

El difícil acceso a la vivienda

Tuve que volver en casa de mis padres con 27 años porque con mi sueldo no me da para poder pagar un alquiler y ni una habitación. Las habitaciones para compartir cuestan unos 500 o 600 euros, incluso con gastos aparte. Para poder alquilar necesitas por lo menos dos meses de nómina en un contrato indefinido y un sueldo que la mayoría de la gente no tiene. A estas alturas, no sé en que momento me voy a independizar. Todos los jóvenes deberíamos salir a la calle a alzar la voz. Mientras sigamos callados, la situación no cambiará.

Liz Adriane Duarte Rasch. Corbera de Llobregat (Barcelona)