Acaparar sin necesidad

El paro de un sector minoritario del transporte, apoyado y sostenido por la extrema derecha, amenaza con vaciar las estanterías y neveras de España. El miedo infundado a quedarse sin productos básicos está alimentando comportamientos histéricos, todo un clásico de los Apocalipsis de temporada. Ayer le tocó al papel higiénico y hoy, al aceite de girasol. ¿De verdad resulta tan difícil controlar esta ansia acumuladora? ¿Qué nos pasa para perder la razón por algo tan absurdo? Dudo que la mayor parte de nosotros conozca el hambre, salvo de oídas. Mi abuelo, que vivió la guerra y la posguerra, siempre diferenciaba el hambre del apetito, y se incomodaba cuando le preguntábamos a la hora de comer si ya tenía hambre. “Hambre no, apetito”, recalcaba. Esta sociedad nuestra solo tiene apetito, un apetito voraz que induce este comportamiento egoísta de acaparar sin motivo y que redunda, al final, en perjuicio de todos. Modérense, y dejen algo para el Juicio Final.

Gonzalo de Miguel Renedo. Logroño

Autónomos

Soy periodista autónoma e hija de un transportista autónomo. Nadie plantearía que los periodistas autónomos somos la patronal, pues nuestros problemas difícilmente se asimilan a los de los magnates mediáticos. ¿Por qué se compra esta narrativa en el caso de los transportistas? He sido testigo toda mi vida de las fatigas que implica ser un transportista autónomo. Al igual que en mi caso, sus condiciones laborales son compartidas con sus compañeros asalariados y no con los oligarcas del transporte. Sin embargo, el Gobierno se reúne con la patronal contra la que estos trabajadores protestan, calificándolos de ultraderecha. Dudo mucho que esto sea así, pero seguramente los están empujando a ello. Un Gobierno que dice estar al lado de los trabajadores debería replantearse esta postura.

Victoria Silva Sánchez. Córdoba

¡Ya está bien!

Leo en EL PAÍS que el Gobierno de la Comunidad de Madrid ha montado su propia estructura para acoger a refugiados ucranios en el hospital Zendal. Y que el Gobierno de España le ha pedido explicaciones por no seguir la estructura única creada para la ocasión. Ya está bien, señora Ayuso: si eso lo hiciese la Generalitat sería insumisión, diría usted. Bueno, pues es insumisión, figura que su Gobierno está rozando a menudo. ¿Tendrán que aplicar a Madrid el artículo 155 si sigue así?

Jesús Bermejo Bermejo. Madrid

Humanizar la atención al ciudadano

Tengo 36 años, ni joven ni mayor, soy adulta; con estudios, trabajo y un coeficiente intelectual medio. Acabo de comprar una vivienda, lo que me ha supuesto un sobreesfuerzo mental y mucho estrés. No dejo de empatizar con la gente poco familiarizada con internet y las nuevas tecnologías a la hora de presentar documentos con firma electrónica (algo que a priori es sencillo) o a tratar con comerciales de bancos y eléctricas por teléfono o correos electrónicos automáticos sin que te cuelen un servicio que no necesitas. Humanicemos la atención público/privada a todos los niveles. Además de usuarios y clientes, somos personas.

Cristina Cándido. Madrid