Ir al contenido
_
_
_
_

Una ministra italiana critica las visitas escolares a Auschwitz por hacer ver “que el antisemitismo es solo una cuestión fascista”

La senadora Liliana Segre, superviviente del Holocausto, le responde que “la memoria de la verdad solo puede hacer daño a quienes tienen esqueletos en el armario”

Íñigo Domínguez

La llegada al poder en Italia de la ultraderechista Giorgia Meloni, hace tres años, marcó el inicio de una tendencia a reescribir la historia del país y de polémicas periódicas sobre episodios del pasado, como la resistencia durante la Segunda Guerra Mundial y el terrorismo neofacista de los llamados años de plomo. Pero en los últimos meses, desde el triunfo de Donald Trump en Estados Unidos, con la ofensiva de Israel en Gaza y tras el asesinato del trumpista Charles Kirk en septiembre, en el Gobierno italiano se han disparado las declaraciones que acusan a la izquierda de antisemitismo y extremismo violento.

La última, no obstante, ha superado las precedentes. La ministra de Igualdad de Oportunidades y Familia, Eugenia Maria Rocella, dijo en la tarde del domingo: “Las excursiones escolares a Auschwitz se han usado para decir que el antisemitismo es una cuestión fascista y basta”. Y añadió que hay que “revisar hasta el fondo todo lo que ha ocurrido en nuestro pasado, como ha hecho Alemania”.

Roccella, del partido Hermanos de Italia, la formación de Meloni, pronunció estas palabras en un convenio organizado en Roma por la Unión de las Comunidades Judías Italianas (UCEI). Su frase se enmarca en un razonamiento en el que afirmaba que el antisemitismo también está en la izquierda, como demostrarían, a su juicio, las movilizaciones recientes contra la ofensiva de Israel en Gaza. Sin embargo, señalaba que los viajes escolares que desde hace años realizan miles de alumnos italianos a los campos de exterminio en Alemania pretenden ocultarlo, para hacer ver que el antisemitismo fue solo una cosa “de una determinada área, el fascismo”. Por eso se preguntaba para qué servían realmente estas “excursiones”, y cree que han sido “impulsadas porque servían a lo contrario, a decir que el antisemitismo es algo colocado en la historia, en un tiempo lejano, en un pasado histórico”.

Hablando del momento actual, Roccella opinaba que, “en la fase final del conflicto israelí-palestino, el antisemitismo ha encontrado una justificación para su resurgimiento y relegitimación”. “El deleite con el que se usa la palabra ‘genocidio’, echándosela en cara a quienes tienen una experiencia bien documentada y detallada del genocidio [en alusión a los israelíes], es verdaderamente impactante. El antisemitismo en nuestro país no se ha abordado plenamente”, concluía.

En Italia se han registrado desde el 7 de octubre de 2023, día del ataque terrorista de Hamás contra Israel, un aumento de episodios de antisemitismo, un total de 733, según informó la semana pasada el Ministerio de Interior, y es un asunto de debate en Italia.

Las palabras de la ministra han causado escándalo en la oposición, pero sobre todo ha destacado la respuesta de la senadora vitalicia Liliana Segre, de 95 años, que sobrevivió a Auschwitz y representa una de las voces más respetadas de la memoria histórica italiana: “Me cuesta creer que un ministro de la República, tras haber definido ‘excursiones’ los viajes educativos a Auschwitz, pueda haber dicho que se han organizado para incentivar el antifascismo. ¿Cuál sería la culpa?“, planteó. Y añadía: ”Durante la Segunda Guerra Mundial, en toda la Europa ocupada por las potencias del Eje, los nazis, con la ferviente colaboración de los fascistas locales —incluidos los italianos de la RSI [República Social Italiana, nombre del régimen fascista de Mussolini en el norte de Italia en los últimos años de la guerra]—, llevaron a cabo una colosal industria de la muerte para borrar de la faz de la tierra a los judíos, romaníes, sinti y otras minorías. La formación de nuestros hijos y nietos debe partir del conocimiento de la historia. La memoria de la verdad solo puede hacer daño a quienes tienen esqueletos en el armario”.

Otra superviviente de Auschwitz, Tatiana Bucci, de 88 años y que durante 40 años ha acompañado allí a escolares italianos, también ha contestado a Roccella diciendo que “se equivoca”. Opina que esas visitas sirven “para hacer comprender a las nuevas generaciones lo que fue el nazi-fascismo”. “Los alemanes han aceptado su pasado. Nosotros, los italianos, no. Nunca lo haremos. No queremos admitir las culpas del fascismo”, ha replicado. En cuanto al antisemitismo, considera que hoy también se encuentra en la izquierda, “pero yo culparía a Netanyahu y a sus ministros, han bombardeado hospitales, han matado niños”. “Al hacerlo, Netanyahu se ha puesto al mismo nivel que Hamás, acusa.

También la dirección del Memorial de la Shoah de Milán ha recibido las palabras de la ministra con “estupor”: “Presentar las visitas a estos lugares como resultado de un diseño político de parte, limita ante todo la memoria de las víctimas y representa una falsedad histórica”.

La oposición ha pedido a la primera ministra, Giorgia Meloni, que desautorice a la ministra por “insultar los viajes a la memoria de Auschwitz e intentar reescribir la historia”, pero el Gobierno ha guardado silencio. En las últimas semanas, la líder de la derecha italiana aprovechó el asesinato del dirigente extremista Charles Kirk en EE UU para denunciar que en Italia también había “un clima de odio insostenible” de la izquierda, y el viernes llegó a afirmar que la oposición en Italia “es más fundamentalista que Hamás” y practica “el negocio del odio”. En días pasados también atacó a la flotilla humanitaria que se dirigía a Gaza, tachando a sus miembros de “irresponsables” que solo querían dañar a su Gobierno; y se burló de la reciente huelga general y las manifestaciones de solidaridad con Palestina, diciendo que únicamente se hacían “para alargar el fin de semana”.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Íñigo Domínguez
Corresponsal en Roma desde 2024. Antes lo fue de 2001 a 2015, año en que se trasladó a Madrid y comenzó a trabajar en EL PAÍS. Es autor de cuatro libros sobre la mafia, viajes y reportajes.
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_