Médicos peruanos abandonan un hospital tras 23 días de huelga

La tarde del miércoles, frente al ministerio de Salud, unas 300 enfermeras de la capital y de otras regiones del país, tras haber pasado la noche en carpas, coreaban lemas y reclamos. “¡Hospital Cayetano Heredia, presente! Palmas, colegas, sino, nos enfriamos“, exclamaba una veintena de trabajadores sentados en el piso. Esperaban una nueva negociación con los funcionarios del sector Salud. Por la noche, los dirigentes calificaron de insuficiente la propuesta del ministerio, y la tarde del jueves los dirigentes de la Federación Médica Peruana entregaron al Estado el primer hospital, para radicalizar la huelga nacional que empezó el 16 de julio.

Desde que empezó la huelga de 16.000 médicos del ministerio de Salud, los noticiarios de televisión relatan a diario el sufrimiento de los pacientes más pobres, dada la escasa atención ambulatoria en los consultorios , aunque los profesionales en huelga han garantizado su trabajo en los servicios de emergencia y en cuidados intensivos. La medida de fuerza coincide con por lo menos dos muertos por día a causa de la gripe AH1N1 en varios departamentos del país andino, aunque 17 ocurrieron en la capital, según el ministerio de Salud.

El miércoles y el jueves, otros nueve mil profesionales del seguro social de salud (Essalud), también paralizaron no solo pidiendo aumentos, sino en rechazo a la privatización y sobrevaloración de algunos de sus servicios.

El año pasado, la huelga médica de 32 días entre setiembre y octubre, terminó cuando el Gobierno aceptó pagar un bono extraordinario de 1.351 dólares a médicos, por única vez, en diciembre y mayo. El acta que firmaron las partes el 20 de octubre indicaba que el gobierno presentaría una propuesta de incremento mínimo de 536 dólares “de acuerdo al nivel que corresponda a cada médico”. El acuerdo fijaba julio de este año como la fecha para que dichos incrementos se concretaran y también consideraba nombramientos de profesionales de la salud que entonces trabajaban con contratos temporales de servicios.

El presidente de la Federación Médica, César Palomino, indicó el jueves que las autoridades del ministerio de Salud no han respetado el compromiso pues si bien les han ofrecido ese monto no es como remuneración efectiva sino, en parte, por concepto de bonificaciones.

Palomino anunció, vía un canal de televisión de cable, la entrega al Estado del hospital Belén, en la ciudad de Chiclayo (Lambayeque, costa norte del país), es decir, el abandono de sus funciones. El hospital con capacidad de 118 camas mantenía solo a cuatro pacientes, luego de que el resto fue referido a otros centros o dado de alta. El dirigente gremial aseguró que garantizaban la atención en emergencia y cuidados intensivos. “Esto que ocurre tiene responsables y son la ministra de Salud y el ministro de Economía”, añadió.

El presidente Ollanta Humala invocó a los huelguistas a ser responsables. “Estamos hablando de montos por encima de 600 millones de soles. Como Gobierno representamos a los 30 millones de peruanos y en cada acto que hacemos tenemos que ver la seguridad y el interés de los 30 millones. Los médicos quieren una mejora legitima de sus salarios, pero si no guardamos un equilibrio responsable vamos a pagar una factura muy alta”, añadió.

Otros reclamos

La huelga de las enfermeras en el frontis del ministerio de Salud, sin embargo, no se debe solo a reivindicaciones salariales. “No se ha concretado un reglamento para que los nombramientos en el primer nivel de atención (centros y puestos de salud) sean por concurso, como indica una resolución de 2005. Eso también estaba en el acta”, explicó a EL PAÍS Madelenny Sarria, secretaria de organización de las redes de salud de Lima Norte (Red de salud IV, Túpac Amaru), perteneciente a la Federación de Enfermeras del Perú.

“También había el compromiso de cambio de grupo ocupacional: de técnico a enfermero, para que pueda recibir el sueldo que le corresponde”, añade Sarria. La enfermera indicó que hay otras mejoras de servicios que han solicitado. “Yo atiendo a pacientes de tuberculosis y si no llegan los recursos me las tengo que ingeniar para hacer el trabajo”, comentó.

El Gobierno ha vuelto a convocar a los dirigentes del sector salud a un diálogo este viernes. Los pacientes se identifican con los reclamos de los trabajadores pero, a la vez, expresan impotencia cuando sus citas no se cumplen o cuando ante una emergencia no hay atención. El primer ministro ha anunciado que el Ejecutivo promulgará la ley que aprueba la delegación de facultades para legislar en salud, pero los sindicatos del sector, que son muchos en el país, consideran tardías estas gestiones debido al compromiso que el Gobierno firmó el año pasado.