Ahmadineyad culpa a Occidente del desplome de la moneda iraní
La mala gestión financiera y las sanciones internacionales por el programa nuclear explican la caída. "Es una guerra oculta a escala planetaria", ha dicho el presidente
El rial iraní ha perdido un tercio de su valor con relación al dólar estadounidense durante la última semana. El presidente Mahmud Ahmadineyad ha atribuido hoy martes esa depreciación a la “guerra económica a escala planetaria” que Occidente ha lanzado contra Irán para hacerle renunciar a su programa nuclear. Sin embargo, el desplome de la moneda iraní parece tanto fruto de las sanciones internacionales como de la desastrosa gestión de las finanzas públicas por parte de su Gobierno.
A media mañana un dólar llegó a cambiarse por encima de los 37.000 riales en algunos cambistas de Teherán, según informaciones coincidentes de las agencias de prensa. Aunque antes del cierre el rial lograba recuperarse ligeramente en medio de rumores sobre una intervención contra los especuladores, el mal ya estaba hecho. Ese mínimo histórico desató la alarma ya que suponía una depreciación de un 8% respecto a los 34.200 del cierre de la víspera y la pérdida de casi un 40% respecto al lunes de la semana pasada, cuando el billete verde se cambiaba a 24.500 riales.
“El enemigo [nos] ha impuesto sanciones (…) contra las ventas de petróleo. Una gran parte de las divisas provienen del petróleo. Y lo que es peor, sanciones contra los intercambios bancarios para que si vendemos petróleo no podamos cobrarlo. Es una guerra oculta a escala planetaria”, ha asegurado Ahmadineyad durante una conferencia de prensa retransmitida en directo por la televisión estatal.
La depreciación del rial, que ha ido paralela al creciente aislamiento económico del país, se ha acelerado sin duda durante el último año a raíz del embargo a su petróleo y las sanciones bancarias. Cuando esta corresponsal llegó a Irán a finales de 2005, un dólar se cambiaba por 9.000 riales. En julio del año pasado, cuando las autoridades la expulsaron del país, rondaba los 11.000. Desde entonces, ha perdido casi el 80% de su valor hasta el cambio actual.
Además de la dificultad para cobrar el petróleo que vende y obtener divisas, han influido también otros factores. El Gobierno tiene una larga trayectoria de intervención en la economía. Aunque a partir de 2002 unificó las distintas tasas de cambio, mantuvo un tipo oficial de referencia, en la actualidad fijado en 12.260 riales, para operaciones estatales.
El desplome de la moneda en el mercado libre reabrió las puertas a la especulación y los empresarios empezaron a tener dificultades para conseguir divisas. Con el objetivo de estabilizar el rial y evitar los abusos, el Banco Central lanzó la semana pasada un Centro de Cambio de Divisas, para dar prioridad a los importadores de productos básicos, como comida y medicinas. La medida sin embargo transmitió el mensaje de que el país se estaba quedando sin dólares, a pesar de que sus reservas de divisas se estiman en 110.000 millones. Muchos iraníes, temerosos de una nueva depreciación, se lanzaron a comprar dólares, provocando la caída de los últimos días.
“El Gobierno no tiene escasez de divisas y puede inyectar [dinero] en el mercado durante mucho tiempo”, ha tratado de tranquilizar el vicepresidente del Parlamento, Mohammad Reza Bahonar, en declaraciones a la agencia Mehr.
Pero Reuters mencionaba que algunos analistas consideran que las reservas han empezado a reducirse, lo que puede explicar la renuencia del Banco Central a inyectar más dólares en el mercado durante la semana pasada. El ministro Israelí de Finanzas, Yuval Steinitz, afirmó el domingo que la economía de Irán está “al borde del colapso” y estimó que ese país ha dejado de ingresar por ventas de petróleo entre 45.000 y 50.000 millones de dólares debido a las sanciones.
“Estamos muy nerviosos y preocupados; ¿qué va a pasar si sigue aumentando el precio del dólar?”, confía Merdad G. en una conversación por Skype. “La leche ha duplicado su precio en el último año, la carne está por las nubes y mucha gente no puede comprarla, la torta de pan ácimo ha pasado de 1.000 riales a 6.000”, asegura este profesional que viaja con frecuencia fuera del país. “Incluso quienes tenemos la suerte de tener un buen trabajo y poder hacer frente a esos gastos, hemos visto como nuestros ahorros se reducían a la mitad en un año, ¿cuánto más podemos aguantar?”.
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