El PPE apoya a Aznar y pide que la Constitución europea reconozca la herencia cristiana
Los líderes conservadores de Europa también critican el reparto de poder establecido por el proyecto de Giscard D'Estaign
El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha recibido hoy el apoyo del Partido Popular Europeo (PPE) a sus opiniones respecto al proyecto de Constitución europea. Los conservadores europeos han mostrado su adhesión a las tesis de Aznar en cuanto al reparto de poder que establece la Carta y a su opinión de que el proyecto debería reconocer explícitamente el valor de la herencia cristiana en la UE.
Aznar ha participado en la localidad griega de Sani en la reunión del PPE previa a la Cumbre de la UE de Salónica y en la que se ha analizado el resultado de los trabajos de la Convención para el futuro de Europa. Uno de los aspectos que no gustan a Aznar y en el que ha sido respaldado por el PPE es el sistema de voto en el Consejo previsto en el proyecto de Constitución. Varios primeros ministros y presidentes de algunos partidos integrados en el PPE -han abogado por no modificar "sustancialmente" el reparto de poder institucional pactado en las cumbres comunitarias de Niza y Laeken, según ha explicado el secretario general de los populares europeos, Antonio López Istúriz.
Mayor presencia del cristianismo
Los conservadores pretenden que la Conferencia Intergubernamental que debe desarrollar el contenido definitivo del texto elaborado por la Convención, que comenzará sus trabajos en octubre, aborde esta cuestión. Asimismo, están de acuerdo en que se refleje más explícitamente en el texto de la futura Constitución la fuerte influencia del cristianismo en Europa, tanto en el pasado como en el presente. Según Istúriz, "quien quiera construir la UE debe recordar su proceso histórico y sobre todo la fuerte influencia del cristianismo tanto en el pasado como en la actualidad"
Pese a esas precisiones, los líderes del PPE han expresado su felicitación a los miembros de la Convención Europea por su labor en beneficio de la construcción comunitaria. No obstante, los asistentes a la reunión han expresado su deseo de que la CIG comience cuanto antes sus trabajos para que pueda concluir en Roma en diciembre de este año.
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