Patatas deluxe al horno
Fritas parecen, asadas están. Ésta es la receta definitiva para hacer las patatas gajo con especias, y encima, sin gastar aceite y sin olores.
Ya sabemos todos que las patatas fritas son —o deberían ser— Patrimonio de la Humanidad. Crujientes, calentitas, sabrosonas; la prueba del algodón de si en una casa o restaurante se hacen las cosas decentemente o no. Lo malo, además de que engordan cosa fina, es la pereza infinita que da ponerse a freír patatas para un regimiento familiar. No te digo nada si encima quieres que lleguen recién hechas a la mesa o se te ocurre perpetrarlas para cenar, con el consiguiente olor a freiduría que se te instala en el pelo y en el alma…
Es verdad que existen alternativas interesantes como las papas arrugadas, cocidas, o asadas con gracia, y que tampoco hace falta emperrarse en comer siempre patatas fritas con el filete. Pero ay, esas patatillas con huevo frito, ¡esas picaronas que te tientan al lado del pollo asado! Para estados carenciales de tubérculos dorados traemos hoy unas patatas hechas al horno que no solamente dan el pego, sino que aunque parezca increíble, están más buenas que las fritas. Vulgarmente llamadas deluxe gracias al lavado de cerebro de las cadenas de comida rápida, las patatas gajo llevan diversas especias y además mantienen su piel, aportando un extra de fibra. Si a todo esto le añadimos que en su versión al horno llevan poco aceite y que se pueden hacer sin coger tufo a fritanga, doble miel sobre hojuelas.
¿Que lo que te ahorras en aceite te lo gastas en electricidad? No tanto, sobre todo teniendo en cuenta que puedes hacer dos bandejas a la vez o aprovechar el último rato de cocción de un pollo o plato similar al horno. Lo realmente asombroso es que quedan perfectamente crujientes, más que pasando por una fritura normal.
He adaptado la receta original a nuestro gusto en cuestión de especias, pero por supuesto sois libres de usar las que os dé la real gana. Es muy importante lavar bien las patatas antes de cortarlas, para eliminar cualquier suciedad, y desechar las que tengan un tono verdoso, como contamos aquí. Si hacéis el corte más grueso quedarán más tiernas por dentro, y si es fino, más crocantes. En caso de que no tengáis microondas, se puede apañar el primer paso de la receta cociéndolas enteras brevemente en agua, hasta que cedan a la punta de un cuchillo.
Dificultad: La de encender el horno y punto
Ingredientes
Para medio kilo de patatas:
- 500 g de patatas
- 2 dientes de ajo
- 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra (unos 90 ml)
- 3 cucharadas de almidón de maíz o Maizena (unos 25 g)
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de pimienta negra molida
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 cucharadita de tomillo o romero secos
Instrucciones
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