El consultorio de junio contiene un variadito interesante: ‘fake news’ alimentarias, enfados fuertes con el risotto, sobredosis de nabos y alusiones muy directas a la vagancia del responsable de esta sección
Practicar el purismo en la cocina, adelgazar con la satisfayer, tirar el aceite usado por la ventana y ver muros de pago inexistentes en El Comidista: el consultorio de mayo no escatima en temas candentes
Debates sobre bebidas malignas, antinutrientes asesinos, laureles venenosos y versiones culinarias de 'La matanza de Texas': este consultorio parece una peli de terror, pero también incluye preguntas normales.
En el primer consultorio de 2023 hay dudas sobre almendras y pistachos, inquietudes por el arsénico de las bebidas de arroz y cuestionamientos de los Chocapic. Y también una sopa de paella “con ruido de la Rambla de Barcelona”.
El último consultorio del año tiene casos para todos los gustos: piñas giratorias, paellas con salami, “sudados” en cremas de calabaza y madres que quieren hacer bizcochos con su propia leche.
Problemas de ajofobia, berenjenas correosas, pasteles antiabortistas de gelatina y orcos que exigen programas de cocina: el consultorio de noviembre es un desafío para la salud mental de cualquiera.
El primer consultorio del otoño no decepciona: inquietudes jamoneras, supremacismos vaporeros, platos absurdos para huevos rellenos y hasta depilaciones genitales.
El último consultorio del curso viene intensito: dramas con la verdura triturada, alertas magufas con el café, niñas que escupen la fruta y matrimonios gays a punto de romperse por El Comidista.
Fresones insatisfactorios, pichones peligrosos, toppings molestos y alertas calóricas por el Instagram de Capel: el consultorio de junio está lleno de problemas de extrema gravedad.
Por el consultorio de mayo pasan todo tipo de personas con dudas: aficionados a la 0'0, fans de la mozzarella del Dia, heterosexuales que hacen caldo y señoros beodos de León.
"Tóxicos espeluznantes" en el papel de cocina, plátanos con droga y 'twinks' que gratinan el calabacín: el consultorio de abril demuestra que la primavera la sangre altera.
El consultorio de marzo toca temas importantes: el reposo de los estofados, los fungicidas en las mandarinas, la aparición de unas Tanxugueiras porcinas o la existencia de una taberna 'crazy' llamada López Ybar.
Cafés recalentados, tomates "engusanados", instrumentos de cocina que parecen de tortura y posesiones demoníacas en el caldo: el primer consultorio del año parece una peli de miedo.
El último consultorio de 2021 no defrauda: los lectores preguntan por temas tan importantes como las frecuencias hueveras, los cachopos con aguacate, las lactantes borrachas o los lubricantes comestibles.
Bulos de aditivos procedentes de animales, ejércitos de veganos que acosan a bebedoras de leche y señoras que preguntan si El Comidista es para diabéticos: en el consultorio de noviembre no nos falta de ná.
La identidad sexual del melón, las ranitas de chocolate gallegas y las patatas que hacen "crek crek" son algunos de los temas que preocupan a nuestros lectores en el consultorio de octubre.
El consultorio de julio incluye dudas sobre quesos mohosos, tortillas de Doritos o higos chumbos que producen estreñimiento. Y los habituales correos de gente que no sabe a dónde escribe, claro.
Moldes que "sudan grasa", bandejas de horno que "roban el calor", cocinillas que hablan lenguas raras... los fenómenos extraños inundan el consultorio de junio, pero también hay preguntas normales.
El consultorio de mayo incluye miedos a la silicona, terrores al perejil que te da el pescadero, tres leches con ocho leches y algunos locos consejos nutricionales de Raffaella Carrá
Integrismo paellero clásico, alcachofas de aspecto extraterrestre y personas que están a punto de meter la mozzarella en la lavadora: el consultorio de abril no defrauda.
La higiene de las máquinas para hacer café, las empanadas mentales con la sustitución del azúcar, las catástrofes panificadoras y el tráfico de loroco son algunos de los temas del consultorio de marzo.
El primer consultorio de 2021 llega con leyendas sobre los fitoestrógenos, pizzas con fistros vaginales y heterocuriosos que preguntan por el caldo. Como si fuera 2020, vaya.
El último consultorio del año viene cargado de temas importantes: la homosexualidad y las masas, los sofritos que se vuelven verdes, las carbonaras peligrosas o los ofendiditos de la crema de calabaza.
En el consultorio de noviembre hay amenazas tortilleras, calabazas penetrantes y gais a los que no les sale la tarta de queso. Y muchas dudas alimentarias de personas inestables, como siempre.
El consultorio vuelve por la puerta grande con creativos de las cápsulas, dudosas de la mostaza, vegetarianas que comen cerdo y abuelas que nos llaman "El Comiditas".
Alarmas infantiles conserveras, paellas paleo, sartenes que se abomban y dietas para la flora vaginal: nuestro consultorio psicótico-gastronómico se va de vacaciones dejando el pabellón bien alto.
Fritos reforzados con salsa, monstruos de ensaladilla, magufismo facha y palurdas que van al Celler de Can Roca: el consultorio de julio es una montaña rusa de emociones.