Reina Alexia, reina del fútbol

A pesar de que se lo repetían desde que era niña, Alexia Putellas (Barcelona, 27 años) no lo creía. O no lo quería creer. Sin embargo, pasó. Putellas cambió la historia del fútbol femenino español. Y no existe mejor símbolo que el Balón de Oro que alzó este año en París, un hecho inédito y reivindicativo para España, que tuvo que esperar 41 años para volver a ver a un futbolista, hombre o mujer, coronarse como el mejor de Europa, desde que Luis Suárez lo ganó en 1960. Fue el primer icono del fútbol femenino en España de la marca Nike y sorprendió cuando su imagen apareció por las calles de Barcelona. Pero, sobre todo, Alexia es el hilo conductor de la evolución del fútbol español. Comenzó su viaje en el anonimato, cuando todo era ilusión y amateurismo, para terminar como la líder del Barça campeón de la Champions en Gotemburgo.

Cuando tenía 12 años, Putellas se tuvo que marchar del Barcelona. ¿El motivo? No había equipos para mujeres de su edad. Se marchó al Espanyol y se consolidó en el Levante. Regresó al Barça a los 17 años. Por entonces, el femenino azulgrana ya había dejado de compartir el campo de entrenamiento con otros deportes y trabajaba por las noches en la Ciudad Deportiva. Los vestuarios, sin embargo, eran tres barracones que se habían utilizado durante la construcción de la Joan Gamper. El femenino estaba tan cerca como lejos del masculino. Por eso a Putellas le resultaba surrealista cuando le aseguraban que “se convertiría en la Messi de las mujeres”, por más que participara en la primera experiencia en Europa del Barça: en 2012, las azulgranas cayeron por un global de 7-0 frente al Arsenal.

Cuatro años después del debut en la Champions, el Barcelona femenino pasó a ser profesional. En 2019, los resultados le daban la razón a la apuesta del club. El Barça alcanzó la final de la Champions en Budapest. Pero a Putellas no le parecía suficiente. Pidió al entrenador entrenar más y mejor. Quería levantar la Champions. A partir del fútbol de Alexia, el Barça se convirtió en el primer equipo español en conquistar Europa en 2021. Un éxito colectivo, que elevó a Putellas al máximo reconocimiento individual. “Quiero que este premio sea un antes y un después. Todas las niñas deben tener la oportunidad de ser futbolistas, sin importar de dónde vengan, dónde hayan nacido, el color de su piel y si son hombre o mujer”, pidió Putellas, con el Balón de Oro en sus manos.

Cuando no podía tener un mejor presente, Putellas recordó el pasado y miró al futuro. Sabe que todavía hay mucho camino por recorrer. De hecho, la Liga Iberdrola todavía no es profesional. El Consejo Superior de Deportes (CSD) espera que los clubes se pongan de acuerdo para consensuar una propuesta de estatutos, dos años después de que se lograra el primer convenio colectivo de trabajo. “Me gustaría que el femenino vaya hacia la profesionalidad total. Pero me gustaría que se hiciera con naturalidad. Que nadie se extrañe cuando una mujer diga que es futbolista”, sostiene la azulgrana. Mientras el femenino continúa en su lucha, el Barça gana y reina Alexia. No hay mejor embajadora.

Volver a la portada del ESPECIAL RESUMEN DEL AÑO