La cabaña del tío Tom

En 1851, diez años antes de la guerra de secesión de Estados Unidos que acabaría con la esclavitud en ese país, The National Era, un periódico secesionista editado por el periodista Gamaliel Bailey, publicaba el primer capítulo de una serie que compondría la novela “La Cabaña del Tio Tom”. Su autora Harriet Beecher Stowe, escribió el libro sin haber pisado nunca el sur. Sin embargo, realizó un enorme trabajo de documentación a través de una investigación desarrollada principalmente desde Cincinatti, una de las ciudades abolicionistas más importantes de aquella época. Los detalles de su investigación los publicó en su libro 'A Key to Uncle Tom's Cabin'.

‘La cabaña del tío Tom’ es La novela sobre la esclavitud en Estados Unidos. Narra la historia de varios personajes. El tío Tom es el esclavo negro de la casa que no se plantea otra vida diferente de la que tiene. Es un personaje de una pureza extrema, un hombre recto y bueno hasta límites insospechados que, pese a todos los horrores que padece, siempre logra mantener su fe y su humanidad. Es, a través de este carácter excepcional y de su bondad, que consigue consolidarse como un referente en los distintos espacios de dueños blancos por los que va pasando.

Además del tío Tom, está el esclavo del campo que huye, a través del cual Harriet narra las vicisitudes del viaje de huida, incluido el funcionamiento del tren subterráneo, un sistema compuesto por abolicionistas que ayudaban a los esclavos a huir. También está Eliza, la madre; la niña blanca que quiere a los esclavos; los dueños buenos y los malos; y los capataces esclavos.

'La cabaña del tío Tom' es un documento tremendo en el que la deshumanización de un sistema infame queda desmontada a través de personajes de una humanidad épica. La narración está hecha de una forma que profundiza en los personajes y sus situaciones. Las descripciones de los sistemas de esclavitudes de la vida de los esclavos y los dueños, poseen unos detalles que nos trasladan a la época. También cuidó mucho la autora la reproducción del lenguaje que usaban los protagonistas, recuperándolo en la narración.

Pero lo que más relevante me resulta de este libro es que presenta perfectamente las diferentes formas de percibir la esclavitud por los distintos actores implicados. A través de las diferentes perspectivas queda patente que la esclavitud es un horror, cosa que en nuestros días parece una obviedad, pero cuando se publicó el libro fue muy relevante. De hecho, Abraham Lincoln relacionó este libro con el inicio de la guerra y el triunfo de los unionistas en la guerra de secesión. En 1862 cuando conoció a Stowe le dijo: "¡Así que usted es la pequeña mujer que escribió el libro que inició esta gran guerra!”. El libro también nos ayuda a entender la visión de la otra parte, la que entiende la esclavitud como algo que está ahí inamovible y necesario.

Estos días se ha abierto por fin un debate sobre el racismo institucional y general que tenemos en nuestro país. Esa especie de elefante en la habitación del que nadie quiere hablar. Nuestro país lleva años maltratando a inmigrantes subsaharianos a los que no permite regularizar su situación ni trabajar, a los que acosa, a los que criminaliza. Y, como a los que tenían esclavos en Estados Unidos en 1850, a mucha gente le parece normal y creen que los responsables de dicha situación son los inmigrantes y no el sistema.

Por todas estas razones y para recordar que hasta las costumbres más espantosas fueron primero la norma, fueron legales y se consiguieron quitar a base de mucho trabajo y de mucha información, 'La cabaña del Tío Tom' es un indispensable.