'Fitness' por un sexo mejor: la nueva rareza de Instagram

Todos sabemos que es bueno hacer deporte, pero encontrar el momento de practicarlo ya es otro cantar. De hecho, las excusas para no sudar deberían ser carrera universitaria y justifican por qué la Operación Bikini suele ser un fracaso tan recurrente como el de España en Eurovisión. Pues bien, como una imagen vale más que mil palabras, los prosélitos de la vida saludable han encontrado una nueva forma de animarnos para que abracemos su pasión: las fotografías de sexo deportivo.

Como quiera que el adicto al gimnasio siempre tuvo algo de exhibicionista, estaba claro que no iban a tardar en mezclar el retrato de los pectorales con los filtros de Instagram. Y ahí están: parejas en posturas acrobáticas que ni el kamasutra contempla; o dándose besos mientras hacen flexiones; o… ¿qué es este filtro vaporoso que nos impide ver lo que hacen dos practicantes del #fitSex en los vestuarios? La tendencia se llama fit sex, ha acampado en Instagram y se acompaña del hashtag con el mismo nombre.

Ellas parecen sacadas de un anuncio de barritas dietéticas; ellos del trono de Mujeres y Hombres y Viceversa. Juntos acomplejan al más pintado… Aunque el #fitSex también tiene sus cosas buenas: además de alegrarse la vista, se aprende una barbaridad, oiga. Sobre las fotos imprimen datos presuntamente científicos, como que resulta que hacer el amor durante 30 minutos quema 200 calorías de media… aunque todo depende de la postura, claro; o que al practicar sexo a primera hora del día uno ya no necesita uno cafeína, que para eso sueltas oxitocina (o molécula del amor) a espuertas con un poco de toqueteo.

Los mantras de esta nueva religión tampoco tienen desperdicio: “nadie ha muerto nunca ahogado en sudor”; “las parejas que entrenan juntas se ponen cachondas juntas” o “querida grasa de más: o te diriges a mis pechos o lárgate de mi cuerpo”. Porque al final, muchos de los practicante del #fitSex lo defienden con el conservador argumento de que “la pareja que entrena unida, permanece unida”. Ya que el ejercicio cardiovascular es bueno para el corazón en todas sus acepciones.

Dicho lo cual, llega la duda: ¿es el #fitSex un movimiento con futuro o el enésimo pseudoinvento de las revistas de fitness? A tenor de los que se atreven a publicar sus imágenes con esa etiqueta, no parece que vaya a cambiar nuestra vida. Apenas 250 personas están lo suficientemente orgullosas de su cuerpo serrano como para enseñárselo al mundo. Otra cosa bien distinta es el número de admiradores de esas personas: se cuentan por miles y los 'me gusta' crecen de manera exponencial. Como siempre, dispuestos a habitual con la mirada antes que con el entrenamiento. ¿Hace un pino puente?