La patronal niega que las empresas estén protegiendo sus márgenes subiendo los precios
Íñigo Fernández de Mesa, vicepresidente de la CEOE, lamenta la política impositiva del Gobierno y carga contra la revalorización de las pensiones y el aumento del SMI
El vicepresidente de la patronal CEOE, Íñigo Fernández de Mesa, ha cargado con dureza contra la política impositiva del Gobierno, y ha advertido de los efectos perjudiciales que puede provocar sobre la economía española. “Estamos muy preocupados con las medidas en materia de aumento de impuestos. Esto va a tener un impacto negativo sobre la empresa y el empleo”, ha señalado. Al mismo tiempo, Fernández de Mesa ha criticado también el alza de las bases máximas de cotización incluida en el proyecto de Presupuestos, y la revalorización de las pensiones al 8,5% que se producirá en enero. “El problema de las pensiones no se va a resolver poniendo parches aquí y allá”, ha denunciado.
En contra de las denuncias sindicales y de la línea de pensamiento del Gobierno de coalición, el representante de la CEOE ha negado que la subida de los costes esté siendo integrada en los precios por parte de las empresas para salvaguardar sus márgenes. “La empresa no está repercutiendo en los precios el aumento de los costes, sino que se están absorbiendo gran parte de estas subidas. Es algo que se está viendo en el recorte de los márgenes empresariales”, ha defendido. “Los beneficios empresariales han caído. España es el único país donde el beneficio empresarial está situado por debajo de los niveles anteriores al covid; y, por tanto, somos el único país que no ha recuperado su renta anterior a la pandemia”, ha remachado.
Este argumento, sin embargo, ha sido rebatido por el Banco de España, que en su último boletín económico constata que en los seis primeros meses de 2022 la facturación —de forma agregada— creció a una tasa muy alta: un 48,3% en comparación con el mismo periodo del ejercicio precedente, frente al 12,6% registrado un año antes.
Las críticas vertidas por parte de uno de los pesos pesados del órgano de representación de los empresarios se han producido durante la jornada El mercado laboral frente a la incertidumbre económica, organizada por Adecco este miércoles en Madrid. Durante su intervención, Fernández de Mesa ha vuelto a dejar claro el rechazo que provoca en el empresariado la decisión del Gobierno de gravar a las empresas que obtengan beneficios extraordinarios.
“Creemos que se está yendo en dirección contraria. Con la situación económica que tenemos, aumentar la presión impositiva sobre la empresa española es ir por el mal camino”, ha dicho el mandatario. “Somos es el país con la imposición directa más alta de Europa. Por este camino vamos a ser el campeón de los impuestos. No hay margen para la subida de impuestos para restaurar el equilibrio presupuestario”, ha lamentado.
Durante su exposición, el vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha puesto el foco en el aumento de los costes laborales, a los que ha situado como uno de los principales riesgos a los que se enfrenta el mercado de trabajo en el medio plazo. En este contexto, ha centrado sus ataques sobre el inminente aumento del salario mínimo interprofesional (SMI) que prepara ya el Gobierno.
“Entre 2014 y 2022 el SMI ha subido un 55%, muy por encima de la inflación para este periodo. Lo que ha permitido que muchas personas mejoren su poder adquisitivo de manera muy significativa. No hay ningún otro país de Europa que haya tenido un aumento de esta cuantía —ahora situado en los 1.000 euros mensuales repartidos en 14 pagas—, y si se sigue produciendo de manera exponencial, va a poner en dificultades a las empresas para que puedan contratar a colectivos vulnerables como los jóvenes”, ha destacado.
Factor de sostenibilidad
En esta línea, Fernández de Mesa ha criticado la revalorización de las pensiones de acuerdo con el IPC —que será de alrededor del 8,5%—, y ha considerado insustancial el aumento extra de las cotizaciones del 0,6% durante la próxima década con la que se sustenta el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) y que nutre el Fondo de Reserva. “El problema de las pensiones no se va a resolver poniendo parches aquí y allá. Tampoco aumentando un poquito las cotizaciones. Incrementar las bases máximas sin consultar a los agentes sociales es echarle leña al déficit de las pensiones y va a destruir empleo. Desde la CEOE estamos reclamando que se incluya de nuevo el factor de sostenibilidad. Sin él no se va a poder reequilibrar el sistema de pensiones”, ha indicado.
El factor de sostenibilidad fue incorporado por el Gobierno del Partido Popular en 2013 dentro de la reforma laboral aprobada en ese año, y con él se ajustaba la revalorización de las pensiones de acuerdo con la esperanza de vida de cada beneficiario. Con la última reforma, este apartado quedó derogado —la realidad es que nunca llegó a entrar en vigor—, y fue sustituido por el MEI, del que la CEOE se descolgó durante su negociación.
Como recomendación final, Fernández de Mesa ha sugerido al Gobierno que ayude “al desarrollo empresarial”, puesto que, en su opinión, “es clave para lograr la igualdad de oportunidades y la generación del bienestar en la economía”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.