El Congreso acuerda poner fin al polémico ‘impuesto al sol’

El Pleno del Congreso de los Diputados ha convalidado este jueves el real decreto ley aprobado por el Gobierno para tratar de abaratar el precio de la luz, que incluye la ampliación del bono social y la derogación del llamado impuesto al sol. Los grupos políticos han decidido que la norma se tramite como proyecto de ley para poder introducir cambios. 

La norma que aprobó el Gobierno el 5 de octubre pasado contiene varias medidas: la suspensión por seis meses del impuesto a la generación eléctrica del 7%, que se aplica en el recibo de la luz, la ampliación de los límites de consumo a los que se aplica el descuento del bono social eléctrico, la creación de un bono social térmico y la exención del impuesto especial de hidrocarburos (el conocido como céntimo verde) para el gas destinado a producción eléctrica, entre otras. 

Sin embargo, la medida que más han aplaudido los colectivos ecologistas y las organizaciones que defienden las energías renovables es el fin del controvertido impuesto al sol para el autoconsumo eléctrico. Esta norma, aprobada por el anterior Gobierno del PP en 2015, consiguió poner de acuerdo a todos los partidos de la oposición, que pactaron derogarla.

En enero de 2017 todos los partidos políticos con representación parlamentaria —excepto el PP y Foro Asturias e incluido UPN, socio del PP— presentaron una iniciativa parlamentaria para crear una ley que fomentara el autoconsumo eléctrico sin ningún tipo de cargo y eliminara el denominado impuesto al sol. Este jueves no todos esos partidos han respaldado la convalidación del decreto ley: Ciudadanos se ha abstenido, es decir, ha votado en el mismo sentido que el PP y UPN. Solo Foro Asturias se ha opuesto.

Tras la votación, el Congreso ha acordado tramitar la norma como proyecto de ley de forma que se puedan introducir enmiendas al texto. Todos los partidos han respaldado esa decisión salvo el PNV, que ha votado en contra.

Las medidas de fomento al autoconsumo forman parte del paquete de medias que aprobó el pleno del Parlamento Europeo el pasado enero y que incluyen elevar el objetivo de energías renovables para la Unión Europea hasta el 35% frente al límite del 27% que estaba fijado hasta entonces. Esta decisión se enmarca en los esfuerzos de Europa para cumplir con los compromisos adquiridos en el Acuerdo de París. El texto sobre energías renovables apuesta por impulsar el autoconsumo e insta a los países a "garantizar que los consumidores tengan derecho a convertirse en autoconsumidores de energías renovables". 

50.000 nuevos megavatios

El Gobierno se propone que España instale 50.000 nuevos megavatios (MW) de origen renovable entre la fecha actual y 2030. Eso representa la ejecución media anual de 5.000 MW y necesita de la complicidad del sector empresarial para poder alcanzar el objetivo del 35% de renovable de la energía final, lo que supone el doble que la actual, según anunció este jueves el secretario de Estado de Energía, José Domínguez Abascal, en la inauguración del Congreso de la asociación de empresas de Renovables (APPA) 2018.

La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha valorado "muy positivamente" la convalidación del real decreto-ley de medidas urgentes para la transición energética y la protección de los consumidores por parte de los grupos parlamentarios, y ha celebrado en un comunicado que sea "la primera legislación española" que reconoce el papel activo del consumidor en el cambio de modelo energético.

El sector fotovoltaico asegura también que confía en que en la tramitación paralela de proyecto de ley con procedimiento de urgencia los grupos parlamentarios "mantengan su coherencia con lo manifestado en mayo del 2018 y se respete el texto relativo al bloque de medidas para fomentar el autoconsumo energético". En la nota, valora especialmente la eliminación de los cargos a la energía autoconsumida que no pase por la red (el impuesto al sol) y la simplificación de los trámites administrativos necesarios para poner en marcha las instalaciones de autoconsumo.