Google reduce el beneficio por las cargas de la reforma fiscal en EE UU
Amazon eleva un 30% los ingresos por el impulso del negocio de computación en la nube
Alphabet sigue creciendo con solidez pese a la competencia creciente de Apple, Facebook y Amazon. Es el cuarteto dominante en el sector tecnológico. La matriz de Google despidió el ejercicio registrando una mejora del 22% en los ingresos, hasta los 110.855 millones de dólares. El beneficio rondó los 12.660 millones. Es un 35% menos que hace un año por el ajuste de 9.900 millones derivado de la reforma fiscal en Estados Unidos.
El 85% de la cifra de negocio de Alphabet se genera a través de la publicidad electrónica, que domina de forma aplastante con Facebook. Las dos plataformas buscan orientar su modelo hacia el contenido audiovisual para potenciar los ingresos. Google aspira a ser también un competidor en la computación en la nube, apuesta por la Inteligencia Artificial y diseña dispositivos para aprovechar su base de datos.
La plataforma Google Cloud está incluida en el apartado de otros negocios. Alphabet no desglosa esa categoría. Pero el negocio de la gestión de datos es el mayor contribuyente de esa unidad. Google intenta diferenciarse con este servicio del que ofrecen Amazon y Microsoft. Alphabet anunció en paralelo el nombramiento de John Hennesy como presidente, en relevo de Eric Schmidt.
La matriz de Google tenía 101.000 millones de dólares apartados fuera de EE UU a final del pasado ejercicio. La compañía no explica qué cantidad de esos activos podría repatriar tras pagar los impuestos por el nuevo régimen fiscal, aunque gana flexibilidad para moverlos. Las cargas, sin embargo, provocaron que registrara unas pérdidas de 3.020 millones en el cuatro trimestre.
Con sus servicios de gestión de datos, publicidad y contenidos, Amazon se está perfilando, de hecho, como el gran competidor de Google. Y también ha presentado resultados al cierre de mercado. En su caso registró un incremento del 31% en los ingresos durante el ejercicio 2017, hasta los 177.900 millones. Esta cifra de negocio le aportó un beneficio de 3.030 millones en el año. Es una mejora del 28%, que se explica en parte porque Amazon ha dejado de invertir todo lo que gana.
La recta final del año es, además, muy potente para su portal de comercio electrónico por las compras navideñas y el pasado verano celebró una jornada especial para los abonados a Prime. Pero donde registra los mayores retornos es en Amazon Web Services. La infraestructura de gestión de datos registró 17.460 millones en ingresos y un beneficio de 4.330 millones.
Diversificar
Alphabet se apreció un 45% en el año. Amazon se está moviendo a niveles récord, y se apreció un 25% solo durante el último mes. La escalada supera la valoración bursátil de McDonald´s. Y eso pese a que sus ingresos crecen al ritmo más bajo de los últimos diez años. Jeff Bezos, sin embargo, busca siempre nuevas vías para potenciar su negocio, como hizo al comprar los supermercados Whole Foods.
Amazon y Alphabet presentaron resultados un día después que Microsoft, que en el último año emergió como un gran competidor en el negocio de la gestión de datos. El servicio Azure está duplicando los ingresos y crece el doble de rápido que AWS. Satya Nadella, su consejero delegado, comentó durante la presentación de las cuentas que esta expansión está aún en una fase muy incipiente.
“Va a producirse un incremento en la demanda para la digitalización de las ciudades, de las fábricas, de los hospitales”, auguró Nadella, “hay aún mucho camino por recorrer”. Es un negocio que trata de explotar también IBM reforzando su posición en la nueva generación de tecnologías para el análisis y la gestión de datos. En el cuatro trimestre, tuvo el primer incremento en los ingresos en seis años.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.