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Hacienda obliga a Apple a pagar más impuestos en España

La filial que gestiona las 11 tiendas en España registra pérdidas tras anotarse ajustes contables por impuestos no pagados en ejercicios anteriores

Jesús Sérvulo González

Las filiales de Apple en España pagaron en 2016 más impuestos en España a raíz de la inspección abierta por la Agencia Tributaria. La delegación que controla las 11 tiendas de Apple abonó más de 11,7 millones por impuesto de sociedades, casi cuatro veces más que el año anterior, según figura las cuentas anuales de la compañía. Esta empresa registra pérdidas de 7,2 millones tras realizar ajustes contables para reconocer tributos no pagados en años anteriores.

Tienda Apple en la Puerta del Sol en Madrid
Tienda Apple en la Puerta del Sol en MadridVictor Sainz (EL PAÍS)

Apple es una de las grandes corporaciones mundiales que está bajo los focos de las autoridades tributarias de media Europa. A raíz de la crisis, los países del euro, de la mano de la OCDE, han estrechado la vigilancia sobre las grandes multinacionales que utilizan complejas estructuras societarias y se sirven de avanzados métodos de ingeniería fiscal para eludir impuestos. Apple ha recibido apercibimientos de Francia, Italia, Reino Unido e incluso Bruselas.

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La Agencia Tributaria española también tiene abierto un procedimiento de inspección sobre las dos filiales del gigante de Cupertino en España. Apple Retail Spain, que gestiona las 11 tiendas que tiene en España, reconoce en sus cuentas anuales que reduce los créditos fiscales derivados de pérdidas de años anteriores "en base a la mejor estimación de los administradores de la sociedad y de sus asesores fiscales sobre la resolución de la inspección fiscal en curso". Debido a este movimiento la sociedad sube su gasto del impuesto de sociedades en 4,3 millones y en otros 3,8 millones al reconocer impuestos de sociedades de años anteriores que debería haber pagado con anterioridad.

La sociedad paga en total 11,7 millones en concepto de impuesto de sociedades, frente a los 3,3 millones del año anterior. A raíz de estas operaciones, la sociedad reconoce una provisión por impuestos de 9,1 millones (incluye intereses por 1,3 millones) "por los posibles pasivos fiscales que los administradores estiman que se podrán derivar de la inspección fiscal en curso".

Pérdidas de 7,2 millones

Apple Retail reconoce que la Agencia Tributaria aún está investigando las declaraciones del impuesto de sociedades e IVA e IRPF de no residentes de los años 2009 al 2012. Preguntada la sociedad sobre su situación fiscal, se limitó a explicar que está reflejada en sus cuentas anuales que han sido debidamente auditadas y aprobadas.

A pesar de las indagaciones del fisco, el negocio le va bien a Apple. Hasta el 30 de septiembre del año pasado, cuando concluye su ejercicio fiscal, ingresó 337,2 millones de euros por la venta de sus iphones, ipad, Macbook y el resto de aparatos así como por los servicios asociados. La sociedad ganó 4,5 millones antes de impuestos pero los ajustes provocados a raíz de la investigación de Hacienda provocaron que haya registrado unas pérdidas netas de 7,2 millones de euros.

La otra filial

La otra filial española del grupo presidido por Tim Cook, Apple Marketing Iberia, también ha aumentado su pago en concepto de impuesto de sociedades tras la revisión del fisco. La compañía, que opera como comisionista por las ventas que el grupo realiza en España a través de centros comerciales y otras tiendas no propias, pagó 5,4 millones por el impuesto de sociedades en 2016, frente a los 3,2 millones del año anterior.

La filial multiplicó sus beneficios tras facturar casi un 34% más. Ingresó 36,9 millones de euros y registró un beneficio neto de 10,3 millones cerca de un 150% más que el año anterior. La empresa también refleja en sus cuentas que tiene abiertos a inspección las declaraciones de IVA, impuesto de sociedades e IRNR (no residentes) de los años 2009 a 2012.

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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