_
_
_
_
_

La revisión del PIB revela que la recesión de 2012 fue más profunda

El INE mantiene el crecimiento del 3,2% el año pasado pero modifica su composición: hogares y administraciones públicas gastaron menos de lo calculado inicialmente

Jesús Sérvulo González
Reloj en la fachada de la sede del Banco de España en Madrid
Reloj en la fachada de la sede del Banco de España en MadridEFE

La economía española sufrió en 2012 un retroceso más grave del que se había calculado, según la revisión que el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha hecho de los datos del periodo 2012-2015. El PIB de 2012 retrocedió un 2,9%, tres décimas más de lo avanzado en su momento. La actualización de los datos rebaja el PIB en unos 5.500 millones hasta alcanzar un volumen de 1.075.639 millones al final del año pasado. La nueva cifra afecta eleva la deuda pública en medio punto hasta el 99,7% del PIB el pasado diciembre. El INE confirma el dato de crecimiento de 2015 pero varía la composición del mismo.

Más información
La revisión del PIB aflora una crisis más aguda entre 2011 y 2013
El PIB creció el 3,2% en 2015, la mayor subida desde el inicio de la crisis
El INE estima que prostitución y narcotráfico elevan el PIB un 0,85%

Las políticas de austeridad aplicadas por el Gobierno del PP para combatir el déficit público agudizaron la crisis en 2012 a la vista de la actualización de los datos de la Contabilidad Nacional Anual que difundió este miércoles el INE. La recesión durante el primer año de gobierno del PP de Rajoy fue más profunda como consecuencia de los recortes de gasto público —las Administraciones Públicas redujeron ese año el gasto un 4,7%, el mayor retroceso de la serie— y las subidas de impuestos, que entre otros motivos, provocaron un descenso en el consumo de los hogares del 3,6%.

La nueva foto compuesta por las cifras estadísticas actualizadas refleja una imagen más lúgubre de la economía española en el año en que la embestida de los mercados sobre la deuda española provocó el rescate financiero. Ese año, la economía española retrocedió un 2,9%, tres décimas más de la caída del 2,6% que se había calculado inicialmente.

Esta revisión a la baja del crecimiento de 2012 se arrastra a lo largo del tiempo y afecta al actual PIB. De hecho, el organismo oficial rebaja en unos 5.500 millones el volumen de riqueza nacional a finales de 2015 hasta dejarlo en los 1.075.639 millones de euros. Las consecuencias de esta actualización afecta a la ratio de deuda pública —sube medio punto a en diciembre de 2015, hasta el 99,7%— y al déficit público —aunque muy levemente, apenas tres centésimas—.

Menos consumo en 2015

La evolución de la economía española permite augurar que no será hasta el próximo año cuando se alcance el nivel de PIB previo a la crisis. La serie encadenada, con base en 2010, muestra que fue en 2008 cuando la economía española tocó cumbre. A partir de ese año se desplomó casi un 8% acumulado hasta tocar el mínimo en 2013. Se espera que recupere el nivel de 2008 a finales de 2017 si la economía avanza a un ritmo del 2,3% como señalan los pronósticos oficiales.

El INE mantiene intacto, sin embargo, el ritmo de crecimiento de España en los últimos tres años. Aunque confirma que el PIB retrocedió un 1,7% en 2013; aumentó un 1,4% en 2014 y creció un 3,2% durante el año pasado, modifica la composición del PIB de 2015. Los nuevos cálculos del organismo público muestran que la economía española creció el año pasado con una menor aportación de la demanda nacional (3,3%, frente a 3,7%) y una mayor aportación de la demanda externa (-0,1%, frente a -0,5%).

Respecto a la demanda nacional, el INE ha revisado a la baja tanto el crecimiento interanual el gasto en consumo final (en cuatro décimas, del 3,0% al 2,6%) como el de la formación bruta de capital (en cinco décimas, del 7,0% al 6,5%). Es decir, que la inversión y el consumo tiraron menos de la economía de lo que el instituto público avanzó el pasado febrero. Tanto los hogares y las Administraciones Públicas gastaron menos que la cifra adelantada el pasado febrero. A pesar de ello, ambas magnitudes registraron la mejor evolución desde que estalló la crisis financiera en 2008 y contribuyeron decisivamente al buen comportamiento de la economía española durante el año pasado.

Por otro lado, la aportación negativa del sector exterior fue menor de lo inicialmente estimado porque se compró fuera mucho menos de lo avanzado inicialmente: las exportaciones pasan del 5,4% al 4,9%, y las importaciones también se revisan a la baja del 7,5% al 5,6% de la última actualización.

En términos nominales, teniendo en cuenta la evolución de los precios, ascendió al 3,7% en 2015, una décima menos de lo calculado inicialmente porque el deflactor del PIB se rebaja una décima hasta el 0,5%.

Las cifras de empleo mejoran tras la actualización

"El empleo en términos de miles de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo se cifra en 16.885.000, lo que supone un incremento del 3% respecto al año anterior", señala el Instituto Nacional de Estadística (INE) en la nota difundida ayer para explicar la actualización de las cifras de Contabilidad Nacional del periodo 2012-2015.

La revisión estadística del INE muestra que la creación de empleo fue ligeramente superior a la avanzada en febrero. El número de empleos equivalentes a tiempo completo se ha revisado al alza en 33.000 puestos de trabajo.

También se han actualizado al alza las horas efectivamente trabajadas. Pasan de 31.273 millones de horas a 31.428 millones, unas 155.000 horas más.

La remuneración de asalariados, que subió un 3,8% en 2015, ha mejorado tras la actualización del INE, hasta suponer 510.344 millones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_