_
_
_
_
_
Reportaje:BELLEZA

Una cara muy fresca

Algo ha cambiado en el mundo de la moda. En el perfil de las modelos, concretamente. Si antes se las tachaba de ser la encarnación de la frivolidad (véase la frase "No me levanto de la cama por menos de 10.000 dólares diarios" con la que Linda Evangelista y sus compañeras de camada pasarán a la posteridad), ahora todas proyectan una imagen que se ha escorado hacia una dirección deliberadamente más sana. Yoga, activismo político, ecología, familia... Estos son los términos que salpican el discurso de las maniquíes del siglo XXI. Otro lavado de cara para la industria que un día se caracterizó por vender falsas ilusiones.

'Top model', vegetariana y creadora de la Fundación Collage para la concienciación sobre el medio ambiente. Así es Angela Lindvall (37 años), imagen de la firma de cosmética Biotherm para su último lanzamiento: el tratamiento antifatiga Skin Ergetic. Hija del medioeste americano (es de Oklahoma), su iniciación en el arte de posar no difiere de la de muchas otras. Con 14 años dio un estirón con el que rompió el cascarón de patito feo (para, de paso, confirmar el tópico de que, de pequeñas, todas las modelos eran poco agraciadas). Esos centímetros de más la introdujeron en el campo visual de un cazatalentos que durante un desfile al que Lindvall asistió como público se preguntó lo inevitable: "¿Quién es esa chica?". Al cabo de dos años, esa chica era la de la portada de la revista i-D. Y eso que la que quería ser modelo era su hermana. Luego vinieron los desfiles: París, Milán y Nueva York. Y cuando su carrera parecía más encarrilada se convierte en madre. A los 23 años. ¿El fin? En absoluto. Otro hijo y un divorcio después, Lindvall desmiente ese otro tópico que desaconseja ejercer la profesión con intermitencia. "¿Qué iba a hacer, si me quedé embarazada y todas las células de mi cuerpo me estaban pidiendo que tuviera al niño?".

Esta mañana del pasado abril, Lindvall habla desde debajo de una cascada de pelo. Tiene la cabeza echada hacia delante para que el peluquero pueda ahuecarle la melena. La transformación ya se ha operado. La chica que entró en el estudio fotográfico irradiando normalidad a golpe de cara lavada, zapatillas Converse y pantalones vaqueros, ahora es una hembra alfa. Por eso delante del model lleva un top. Pero no hay nada de forzado en el proceso. Esa naturalidad es precisamente la que le convierte en el rostro perfecto para Biotherm. Alejada del glamour y las promesas de eterna juventud, Biotherm es el ejemplo más claro de marca con un enfoque biológico, no cosmético o clínico. La identificación entre marca y modelo es total. Ella lo confirma dejando claro que "respeto por la naturaleza no equivale a vivir de manera espartana, luego incómoda. A veces es difícil encontrar productos naturales agradables al tacto o al olfato. No es el caso de Biotherm. Todos sus tratamientos son placenteros. Es lo que yo llamo ecología feliz".

¿Un último consejo? "Si alguno se está divorciando, que no convierta el proceso en una batalla legal".

Angela Lindvall, con un peinado con ondas amplias, al estilo años cincuenta. La sombra de 'Mad Men' se alarga más allá de las pasarelas.
Angela Lindvall, con un peinado con ondas amplias, al estilo años cincuenta. La sombra de 'Mad Men' se alarga más allá de las pasarelas.NICO
Angela Lindvall luce un peinado con un juego de curvaturas que recuerda a los años ochenta, pero que no resulta extemporáneo
Angela Lindvall luce un peinado con un juego de curvaturas que recuerda a los años ochenta, pero que no resulta extemporáneoNICO

Energía en tarros

El último lanzamiento de Biotherm se llama Skin Ergetic, una serie de tratamientos (serum, crema de día y crema de noche) en los que la naturaleza se pone al servicio del combate contra los signos del cansancio. Entre sus activos destacan el extracto de brócoli y los activos de té. Ellos lo llaman "cosmética fresca".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_