Siete días en prisión

El jueves pasado, la policía de Copenhague detuvo al presidente de la ONG Greenpeace España, Juan López de Uralde, cuando éste se coló, con otros tres activistas, en la recepción que dio la reina Margarita de Dinamarca a los mandatarios que acudieron a la Cumbre contra el Cambio Climático.

Siete días después, López de Uralde y sus compañeros (Nora Christiansen, Christian Schmutz y Joris Thijssen) siguen en prisión preventiva, "en régimen de aislamiento y sin juicio", según la organización.

La detención llegó ayer al Congreso, donde el PP pidió al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que el activista "pase las Navidades en casa".

La embajada española en la capital danesa ha informado de que ha suministrado al ecologista la misma atención que a otros detenidos, con varias visitas e información sobre el sistema judicial danés.

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La indigestión de Copenhague

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