Frenazo a la conversión de Collserola en parque
Las diferencias entre Baltasar y Nadal tienen el proyecto encallado
Las diferencias en el seno del tripartito mantienen aparcada la declaración de la sierra de Collserola como parque natural. El consejero de Medio Ambiente, el ecosocialista Francesc Baltasar, presentó en marzo a bombo y platillo el acuerdo para fijar los límites del parque, que pasaba de 7.515 a 8.320 hectáreas, y dijo que la tramitación era inminente. Siete meses después, nada. Medio Ambiente ha sido incapaz de impulsar la declaración por desavenencias con Política Territorial, cuyo titular es Joaquim Nadal. CiU y los ecologistas critican la parálisis.
Tras el último Consell Executiu, Baltasar negó a este diario diferencias en el tripartito. "No hay problemas con Obras Públicas. Es sólo la complejidad de la tramitación", dijo, y añadió que el proyecto seguía su curso. En principio, Baltasar y Nadal tenían que reunirse esta semana para desatascarlo. Anteayer, la edil de Barcelona Elsa Blasco (ICV) dijo a la comisión de Urbanismo que conocía el problema, pero que no podía explicarlo. Luego, votó una propuesta de ERC, aprobada por unanimidad, para que el Gobierno declare Collserola parque natural.
"Hace tres años que dicen que es inminente", lamenta Ramon Espadaler
En marzo pasado, Baltasar firmó el convenio para que la Generalitat entrara en el Consorcio de Collserola, hasta entonces integrado por la Diputación, la Mancomunidad y nueve municipios. Antes del verano, el Gobierno tenía que aprobar una subvención de 700.000 euros y sacar el proyecto a exposición pública.No ha sido así. "Desde 2005 dicen que es inminente", lamentó Ramon Espadaler, diputado de Unió. En el debate de política general del Parlament, los partidos del tripartito aprobaron una resolución en la a favor de declarar Collserola parque natural. Días después, CiU sólo logró arrancarles un compromiso "verbal" de que sería en esta legislatura. "¿Otra resolución? Nos tienen hartos" "¡Que lo aprueben ya!", expresó con cansancio Pilar Nieto, de la coordinadora en favor de Collserola. Manel Conill, de Depana, hizo un diagnóstico demoledor: el Pacto del Tinell de 2003 recogía las medidas en favor de los parques pero sólo se ha creado uno. "Se ha instalado la cultura del no a la naturaleza. Siempre surge un problema", apuntó Conill, que culpó a Obras Públicas de frenar el parque y a Medio Ambiente de su incapacidad para impulsarlo.
Desde Iniciativa señalan que Obras Públicas ha querido tener tener el lápiz ante el freno que podría suponer el parque. Pero el secretismo es tal que hay mil teorías: Núria Buenaventura, directora general de Medio Natural, lo achacó en febrero a una razón burocrática por la subvención. Laura Vilagrà, diputada de Esquerra, apuntó un recorte de gastos por la crisis aunque el Departamento de Economía recordó que cada área fija sus prioridades. ICV gestiona Medio Ambiente desde 2003 y el asunto le genera inquietud: quiere ir a las elecciones con el parque aprobado. El diputado de ICV Daniel Pi señaló que sólo restan flecos: "Y no queremos hacer un parque de mentira. Queremos una figura de protección seria".
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