Las administraciones no han tardado ni una semana en atajar la crisis del Palau de la Música abierta por la intervención de los Mossos d'Esquadra por orden judicial por presunto desvío de 2,29 millones de euros. La Generalitat, el Ministerio de Cultura, el Ayuntamiento de Barcelona y el Orfeó Català quisieron ayer transmitir que "la normalidad ha vuelto al Palau".
Barrio del Guinardó de Barcelona. Pau García, de 20 años, estudiante de diseño gráfico y grafitero desde los 14, se reúne con un grupo de amigos para pintar "de legal". Su hermano Marc, publicista y también vecino del barrio, se ha encargado de coordinar a grafiteros y comerciantes para que les decoren las persianas con graffiti.
"Nunca he visto a ningún presidente de comunidad autónoma devolver al Estado competencias que ha pedido porque anteriormente las consiguió Cataluña. Ya va siendo hora de actuar con un poco más de honestidad". José Montilla, no alteró ayer su habitual tono imperturbable, pero puso en Madrid unos cuantos puntos sobre las íes.