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Montilla censura a los que critican a Cataluña y se benefician de sus logros

El presidente carga en Madrid contra el PP y dice que la desafección sigue viva

Clara Blanchar

"Nunca he visto a ningún presidente de comunidad autónoma devolver al Estado competencias que ha pedido porque anteriormente las consiguió Cataluña. Ya va siendo hora de actuar con un poco más de honestidad". Poco amigo de decibelios y tonos crispados, el presidente de la Generalitat, José Montilla, no alteró ayer su habitual tono imperturbable, pero puso en Madrid unos cuantos puntos sobre las íes. Ya vale, dijo, de catalanofobia, en clara referencia a los ataques del PP y algunos presidentes autonómicos, cuando Cataluña "ha desbrozado muchas veces el camino que otros transitan" ("y no nos importa", añadió") y de "utilizar a Cataluña para atacar al Gobierno español". "Presentar a Cataluña como chantajista cuando negocia y defiende sus intereses es falso, interesado".

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En el marco del Fórum Europa y ante la vicepresidenta económica, Elena Salgado; el vicepresidente primero, Manuel Chaves; el ministro de Trabajo, José Corbacho; la ministra de Ciencia y Tecnología, Cristina Garmendia; el de Justicia, Francisco Caamaño, y la de Cultura, Ángeles González-Sinde, Montilla lamentó que siga habiendo motivos para la "desafección" de Cataluña hacia España a la que hace dos años se refirió en el mismo foro.

Al desayuno que organiza el Fórum Nueva Economía (concurrido como pocas veces, aseguraron los asiduos) acudieron el portavoz de los socialistas en el Congreso, José Antonio Alonso; el de ERC, Joan Ridao (sentados uno al lado del otro); el ex presidente de la CNMV Manuel Conthe; la presidenta de la Comisión Nacional de la Energía, Maite Costa, y el defensor del pueblo, Enrique Múgica.

Montilla centró su intervención en el nuevo modelo de financiación y defendió el Estatuto como hoja de ruta para las relaciones entre Cataluña y España. "Es el camino", dijo. En el turno de preguntas, peinó la actualidad política de arriba abajo. Habló de la inminente sentencia del Tribunal Constitucional, se negó a "poner la venda antes que la herida", pero recordó que el Estatuto es "un pacto político, no sólo una ley", y que "no sólo obliga a la Generalitat". Se refirió a la "inexplicable" rotura del diálogo social y la necesidad de "recuperar el clima negociador" y abordar reformas estructurales. Se le preguntó por la polémica sobre si conviene o no reestructurar el Gobierno catalán -zanjada por él mismo con un no- y dijo que no tiene intención de adelantar las elecciones. También salió en defensa de la "lealtad" del independentismo de ERC, "un proyecto que no comparto en algunos aspectos, pero que no se puede atacar si se defiende desde el Estado de derecho", dijo. Y tuvo tiempo para opinar sobre la fusión de cajas: se mostró partidario de que se circunscriba a Cataluña.

El presidente catalán arrancó su discurso de 10 folios condenando el atentado de ETA en Burgos. A continuación se centró en defender un nuevo modelo de financiación que, a su juicio, es una buena herramienta para combatir la crisis económica. Y antes de entrar en detalle, recordó que fue aprobado por todas las autonomías "sin ningún voto en contra". Como ya hizo en el pleno monográfico del Parlament, Montilla señaló que el modelo se ajusta al Estatuto y corrige un trato financiero "intolerable políticamente e insostenible económicamente". A su juicio, no sólo es bueno para Cataluña, sino que "mejora la financiación de todas las comunidades". Fue en este punto cuando afirmó que "una vez más" Cataluña abre camino "hacia un modelo de Estado con mayor implicación y participación de las comunidades autónomas". Todo ello, y aquí volvió a cargar contra el PP, "en un ambiente de recelo hacia Cataluña, jaleado de modo irresponsable por el principal partido de la oposición".

Montilla lamentó que la financiación surgida del despliegue del Estatuto haya "generado una reacción adversa de una intensidad inusitada por parte de importantes sectores de la política y los medios de comunicación". "El España se rompe" o el "Cataluña quiere quedarse con todo", aseguró Montilla, "han renacido con nuevos bríos por parte de aquellos que lo activan o desactivan en función de sus intereses políticos".

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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