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El Senado rechaza el plan de gasto del Gobierno para 2010

El Congreso deberá votar de nuevo el acuerdo de estabilidad

Pablo Ximénez de Sandoval

El PP en el Senado logró ayer una victoria parlamentaria cuya principal consecuencia es que obliga a sus compañeros del Congreso a retrasar una semana sus vacaciones. La mayoría de la Cámara alta, con PP, PNV y ERC (y las abstenciones de CiU, IU y BNG), rechazó el acuerdo de techo de gasto presupuestario para 2010, los 182.439 millones, un 4,6% menos que lo previsto este año. Se trata del marco general para el presupuesto del año que viene, que fija la estabilidad presupuestaria y un compromiso de gasto. La mayoría que lo aprobó la semana pasada en el Congreso de los Diputados (PSOE, Coalición Canaria y UPN, a los que se sumaron varios senadores de partidos pequeños) queda muy lejos en el Senado de poder ganar una votación.

Salgado tomó la palabra al comienzo pero no replicó a los senadores

El rechazo de la Cámara alta no inquieta lo más mínimo al Gobierno. Como se encargó de recordar el portavoz del PP, Francisco Utrera, la Ley de Estabilidad Presupuestaria que hizo su partido establecía que un rechazo al acuerdo de techo de gasto en cualquiera de las dos Cámaras legislativas suponía devolver el texto al Ejecutivo para que volviera a elaborarlo.

En su primer año de Gobierno, el PSOE modificó la Ley de Estabilidad Presupuestaria para quitarle al Senado esa autoridad. Desde entonces, un rechazo del Senado al techo de gasto no devuelve el texto al Gobierno, sino al Congreso, para que vuelva a pronunciarse. Si vuelve a aprobarse por mayoría simple, como sería lo normal, queda aprobado definitivamente. El Congreso va a habilitar un pleno extraordinario para esta segunda votación, previsiblemente el próximo 8 de julio.

La vicepresienta del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado, tomó la palabra al principio del debate para presentar el acuerdo, pero no volvió a intervenir para contestar a los grupos.

El senador del PP Francisco Utrera acusó al Gobierno de predicar austeridad, mientras propone un aumento del gasto público, según sus cálculos, del 15% para el año que viene. Además, aseguró que todo el crédito bancario concedido en el primer trimestre de 2009, que cifró en más de 16.000 millones de euros, ha ido a parar a las Administraciones públicas. "El crédito a las Administraciones está expulsando a empresas y familias del acceso", acusó directamente Utrera.

La portavoz socialista, Yolanda Vicente, defendió la capacidad de los Presupuestos para "aliviar las consecuencias" de la crisis. Pero tanto ella como la vicepresidenta Salgado trazaron un panorama económico desolador de aquí a 2012. Según Salgado, ese año el desempleo en España todavía estará por encima del 17%.

La votación supone un ensayo de los Presupuestos, que han sido vetados tres veces en el Senado y levantados otras tantas en el Congreso.

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Sobre la firma

Pablo Ximénez de Sandoval
Es editorialista de la sección de Opinión. Trabaja en EL PAÍS desde el año 2000 y ha desarrollado su carrera en Nacional e Internacional. En 2014, inauguró la corresponsalía en Los Ángeles, California, que ocupó hasta diciembre de 2020. Es de Madrid y es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense.

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