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Elecciones europeas

Con los fondos de Bruselas

Las ayudas de la UE van a suponer 4.000 millones en 27 años - Euskadi las usa para financiar infraestructuras, recuperar áreas degradadas o impulsar la I+D

Mikel Ormazabal

Euskadi va a recibir entre 1986 y 2013 ayudas económicas de la Unión Europea por 4.041 millones de euros. Supone la cara más visible de cómo la política europea afecta a la vida cotidiana de los ciudadanos. Desde la integración de España en la UE hace ahora 23 años, los fondos comunitarios han contribuido de manera eficiente al desarrollo económico de la comunidad autónoma, la construcción de infraestructuras emblemáticas y la recuperación de espacios que a finales de los ochenta se hallaban muy degradados.

Con el paso de los años, la aportación económica europea ha ido reduciéndose significativamente debido a que Euskadi ha conseguido situarse entre las regiones más punteras de Europa. Para el periodo 2007-2013, el último aprobado por la Comisión Europea, se le han asignado subvenciones por valor de 241 millones de euros, cifra muy inferior a los 1.777 millones del septenio anterior (2000-2006).

De recibir 1.777 millones entre 2000 y 2006 se ha pasado ahora a 241 millones
Unos 15.000 jóvenes estudiantes han participado en el Programa Erasmus
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El País Vasco ha pasado de ser a fines de los ochenta una región de máxima atención para la UE, lo que le sirvió para beneficiarse de un importante paquete de ayudas, a convertirse en uno de los lugares de mayor desarrollo de Los 27. Bruselas sigue estando muy presente a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), aunque en menor medida que en 1986, cuando comenzaron a llegar las primeras aportaciones comunitarias, y los años posteriores.

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La mayor parte de las ayudas recibidas hasta 1999, que totalizaron 2.068 millones, llegaron en forma de fondos estructurales para reducir los desequilibrios económicos y sociales. Euskadi se benefició del Feder, del Fondo Social Europeo (FSE) y del Fondo Europeo de Orientación y Garantía Agraria (FEOGA). Gracias a ellos se financiaron, entre otros proyectos, el Parque Tecnológico de Zamudio, toda la red de polígonos industriales o la reconversión urbanística del área de Galindo en Barakaldo, una de las más deteriorada del Gran Bilbao.

En el periodo 2000-2006 se recibieron de Bruselas 1.777 millones, según un informe oficial. Con este montante se abordaron el plan integral de saneamiento del área metropolitana de Bilbao, el metro, el desdoblamiento de la N-I en el alto de Etxegarate o la restauración de la Catedral de Vitoria. El Kursaal, el Palacio Euskalduna, el Puerto de Bilbao, la bahía de Pasaia o el recinto ferial Ficoba de Irún, son otras de las intervenciones que han contado con fondos europeos. La gestión de las ayudas exige la implicación económica de las administraciones central, autonómica y forales en los proyectos subvencionados.

Bruselas consideró en 2007 que Euskadi cumplía sobradamente las condiciones exigidas para acogerse a los programas Objetivo 2 (apoyo a la reconversión económica y social de zonas con deficiencias estructurales), los de mayor dotación, y enclavó a la comunidad autónoma en una posición más privilegiada. Euskadi se incluye ahora en el apartado de las ayudas a la "competitividad regional y empleo", reservado para regiones con un alto grado de desarrollo económico y social. Esta reclasificación ha supuesto un fuerte descenso en los recursos recibidos. La Comisión aprobó a finales de 2007 el Programa Operativo para el País Vasco hasta 2013, con un presupuesto de 500,3 millones. La contribución de la UE a través del Feder asciende para este septenio a 241 millones, lo que representa en torno al 0,7% de la aportación comunitaria al conjunto de España.

El 71,5% de la inversión total se destinará a fomentar la economía basada en la I+D+i en las empresas y un 20% se dirigirá a reducir el impacto negativo del transporte en el consumo de energía y a favorecer la eficiencia energética y las renovables. También se impulsarán programas de protección medioambiental y de regeneración urbana.

Otra de las grandes líneas de intervención de la UE ha sido la política agraria, que en Euskadi ha tenido como principal referente la gestión de los recursos pesqueros. En los últimos años, las autoridades comunitarias han tenido que actuar directamente para limitar o vedar la pesca de la anchoa al encontrarse en peligro de desaparición en el Golfo de Vizcaya.

Y al margen de la economía, desde 1987 unos 15.000 jóvenes estudiantes vascos han tomado parte en el Programa Erasmus,de intercambio entre alumnos de universidades europeas.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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