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25.000 parejas almacenan células madre de sus hijos en el extranjero

La 'fuga' de cordones umbilicales para uso privado se triplica en un año

El número de cordones umbilicales de recién nacidos españoles que se almacenan en bancos privados del extranjero se ha disparado de forma vertiginosa en poco más de un año. Si en octubre de 2007 había 10.000 parejas que habían decidido extraer la sangre de cordón de sus hijos, rica en células madre, para conservarla fuera de España, actualmente la cifra total es de 25.000.

"Puede que incluso esté cerca de los 30.000", indica Guillermo Muñoz, director general de Crio-Cord, una de las principales compañías que se dedica a este negocio en España. "El año pasado recogimos un 60% más de muestras que el anterior y en el banco de Bruselas ya guardamos 16.000 unidades". "Hay un claro incremento de demanda", comenta Ángel Álvarez, presidente y fundador de Vida-Cord, compañía que trabaja en Nottingham y Varsovia donde custodia 6.000 muestras.

Poco importa que las aplicaciones médicas actuales sean remotísimas para el uso propio o que, en 2006 se permitiera la creación de bancos privados en España, eso sí, con la condición de que la sangre almacenada quede a disposición de cualquier persona que la necesite. Ninguno de estos dos aspectos han impedido que cada vez más padres pongan las esperanzas de curación de eventuales enfermedades de sus hijos -mediante técnicas aún por desarrollar- en estas células madre congeladas. Así, esta opción se ha convertido en un por si acaso que cada vez tiene más adeptos y cuesta de 1.300 a 2.000 euros -entre la extracción, el traslado, el procesado y custodia durante 20 años. Toda la legislación actual surgió tras conocerse que el cordón de la Infanta Leonor se había guardado en el extranjero.

No hay registros oficiales sobre los envíos a otros países, por lo que la información de referencia es la ofrecida por los bancos privados. Sin embargo, el director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, no pone en duda su veracidad: "No parece exagerada esa cifra".

Las casi 30.000 unidades cobran más peso comparadas con las 34.048 que custodian los bancos públicos autonómicos, una cifra a la que casi le pisa los talones. Y aún destacan más frente a las escasas 600 que hay en el único banco privado que funciona en España, que gestiona Vida-Cord, en Alcalá de Henares, desde abril de 2007. ¿A qué obedece el poco tirón que tiene el banco privado nacional frente a los foráneos? Para Ángel Álvarez, responsable de estas instalaciones, la respuesta es sencilla. La ley obliga a que en estas instalaciones las células madre estén a disposición de cualquier paciente que las necesiten a través del Registro Español de Donantes de Médula Ósea (REDMO). "Hay que cederlas si se da el caso, y ante esa posibilidad, la gente prefiere mandarlas fuera para garantizar un uso privado, de forma que indirectamente se beneficia a quien menos contribuye, que son los bancos extranjeros".

Álvarez está convencido de que si a los bancos privados españoles no se les forzara a compartir las muestras, sino que eso fuera voluntario, el número de clientes sería tres veces mayor. Otras empresas, como Crio-Cord, cuentan con autorización para poner en marcha un centro privado nacional, pero no lo ha hecho. "¿Para qué?, los padres no quieren dejarlas aquí, prefieren mandarlas fuera y asegurarse de que sólo ellos podrán usarlas", indica Guillermo Muñoz.

A Rafael Matesanz no le preocupa esta fuga de cordones, ya que "no hay evidencia científica de que cuantas más muestras se recojan mejor". El objetivo de la ONT es tener un número suficiente en los bancos públicos para cubrir al máximo las necesidades de la población española, y esta cifra ideal está en las 60.000 unidades. Al ritmo actual de donación (6.000 anuales), en 2013 ya se habrá llegado.

El responsable de la ONT recuerda que, de momento, las células madre se usan para tratar una veintena de enfermedades, casi todas leucemias. Y frente a "los cuatro casos" demostrados en todo el mundo en los que el autotrasplante (sangre propia de banco privado) ha sido eficaz, se han hecho otros 8.000 trasplantes de bancos alogénicos (sangre donada por otros). A pesar de que hay investigadores discrepantes, "ninguna sociedad científica recomienda guardar los cordones para uso propio", apunta Matesanz. "Otra cosa es respetar la libertad del que quiera hacerlo, la ley lo permite".

Tanque del banco de células de cordón umbilical de Valencia, de la red nacional, donde descansan las muestras a  - 196º.
Tanque del banco de células de cordón umbilical de Valencia, de la red nacional, donde descansan las muestras a - 196º.TANIA CASTRO

Un negocio de medias verdades

"La publicidad está siendo demasiado agresiva, se venden falsas expectativas y remedios que no existen". Esta contundente crítica a la forma de actuar de algunos de los bancos privados que operan en España no proviene de la administración sanitaria, como cabría pensar, sino de las propias empresas. En este caso es Smart-Cells -aunque el juicio lo comparen otras como Vida-Cord o Crio-Cord- quien censura las prácticas comerciales poco ortodoxas de algunas de las firmas de la competencia.

Al calor de la fuerte demanda existente, cada vez son más quienes se sienten atraídos por introducirse en un mercado en pleno crecimiento. "Nosotros fuimos los primeros en 2005 y ahora ya hay más de una docena de empresas que se dedican a esto en España, una locura", apunta Sara Vayrada, de Smart-Cells. De ahí que la pugna por el cliente lleva a algunas compañías a extralimitarse.

Para hacer frente a esta situación la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) ha desarrollado medidas dirigidas a depurar la información recogida en la propaganda y las páginas web de los bancos privados. Cada vez son menos los que venden el remedio al alzhéimer o el cáncer. Pero sigue habiendo muchas inexactitudes, como muestran las actas de la última reunión de control sobre esta materia de la ONT, celebrada en diciembre. En ellas se recoge que hay empresas que "no mencionan que en España hay bancos públicos", o "no dicen en qué país está el banco". Tampoco faltan folletos donde "la tabla de aplicaciones terapéuticas no se ajusta a la realidad" o que ofrecen "información de nulo valor científico". "De la información ofrecida se puede llegar a creer que estás comprando un seguro de vida", señala Matesanz, "y no es así".

Tres posibilidades

- Bancos privados en el extranjero. Entre 25.000 y 30.000 familias españolas almacenan la sangre de cordón de sus hijos en instalaciones, sobre todo, situadas en Inglaterra, Holanda, Alemania, Bélgica

y Polonia. Al exportar las muestras, esquivan la legislación española y se garantizan que nadie hará uso de estas unidades excepto el propio donante.

- Bancos privados en España. Unas 600 familias han elegido esta opción que permite conservar las células madre de sus hijos. Sin embargo, en contra de lo que sucede cuando se envían al extranjero, estas muestras podrán ser utilizadas si alguna persona compatible las necesitara. Sólo existe

un banco de este tipo, gestionado por Vida-Cord,

en Alcalá de Henares.

- Bancos públicos. Existen seis bancos autonómicos destinados a atender los trasplantes de la red sanitaria coordinados por la Organización Nacional de Trasplantes. Las unidades se obtienen por donación altruista (España es el segundo país en donaciones por habitante, por detrás de Australia). Hay 34.048 cordones (oct. 2008) y se espera llegar a 60.000 dentro de unos cuatro años.

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