_
_
_
_
Reportaje:

Cinco minutos de viaje alucinógeno

Fumar 'Salvia divinorum' se pone de moda en Estados Unidos

"¿Salvia divinorum? No he traído. Es una experiencia demasiado intensa para que la gente se la tome en una fiesta". Nat es un joven doctorado en etnobotánica por la Universidad de Nueva York que ha probado desde el ayahuasca a la mescalina, pasando por la Artemisia vulgaris, con la que se hace la absenta o el LSD. "Yo soy partidario del consumo de drogas psicodélicas siguiendo los rituales tradicionales, en ambientes controlados y para ayudar a la mejora personal. Es un error utilizarlas como drogas recreativas". Nat le contestaba así a una joven curiosa mientras servía te suave de hierbas psicodélicas -no produce alucinaciones, sólo relaja- el pasado viernes en la fiesta de inauguración del Congreso Horizons Perspectives on Psycodelics, el segundo encuentro que se organiza en Nueva York sobre el uso de drogas psicodélicas y su relación con la medicina, la historia, la sociedad y el progreso espiritual.

Los que la consumen dicen que esta droga no crea adicción
Se compra por Internet o en tiendas especiales para fumadores
Más información
Prohibida en España desde 2004

Allí se hablará a lo largo del fin de semana, entre otras drogas, de la Salvia divinorum, que últimamente ha recibido mucha atención mediática en Estados Unidos porque Youtube está plagado de vídeos de jóvenes que viajan con esta droga. Fumada permite una experiencia psicodélica de cinco minutos. Pero originariamente los indios mexicanos maztecas masticaban su hoja, y eso produce un subidón más suave pero más largo.

Según datos del gobierno estadounidense, al menos 1,8 millones la han probado, una cifra irrisoria, si se compara con las 6.000 personas que prueban por primera vez la marihuana cada día y los 15 millones de consumidores habituales que tiene esa droga. Sin embargo, en al menos cuatro estados se ha prohibido el consumo de Salvia divinorum entre otras razones porque no se sabe cuáles pueden ser sus efectos a largo plazo. "Es muy difícil dosificarla porque su principio psicoactivo, la Salvinorin A, es el alucinógeno más potente por gramo que existe en la naturaleza. Estimula sólo un receptor del cerebro, el kappa opioide, mientras que el LSD estimula 50. Por eso su uso médico tiene muchísimo potencial", explicaba Nat, que ha probado la hierba una decena de veces en la última década.

"No es algo que te apetezca hacer cada día. Y eso es lo que ocurre con casi todas las drogas alucinógenas. Por eso no son adictivas", señalaba otra usuaria. Aunque sobre ese punto, los médicos aún no se han puesto de acuerdo, entre otras cosas porque los estragos del consumo del LSD en los sesenta erradicó los alucinógenos de la investigación médica, aunque en los últimos años desde Harvard a la Universidad Johns Hopkins han vuelto a interesarse por estas drogas.

Otros consumidores de Salvia divinorum, que se compra en Internet o en tiendas de artilugios especiales para fumadores, coincidían con Nat en que no es una droga que apetezca consumir habitualmente. "Es una experiencia físicamente muy fuerte. Al contrario que el LSD, que te provoca alucinaciones bestiales, con la salvia sientes sobre todo como si tu cuerpo entrara en una cuarta dimensión. No vas ni hacia arriba, ni hacia abajo, ni hacia los lados. Es como si las paredes se cayeran y tu cuerpo entrara en otro espacio, o se fundiera con él... Es muy difícil de describir", señalaba un joven empresario, que con un viaje tuvo suficiente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_