Los sindicatos mantienen sus huelgas en espera de la oferta final de Osakidetza

Las espadas siguen en todo lo alto en la sanidad vasca. Los sindicatos de Osakidetza mantienen sus dos convocatorias de huelga general, previstas para los próximos 21 de febrero y 6 de marzo, a la espera de conocer la última oferta del Servicio Vasco de Salud, que llegará el próximo lunes en una reunión de la mesa sectorial de sanidad.

Tras la reunión que mantuvieron ayer con la dirección de Osakidetza, las centrales no accedieron a desconvocar los paros, el primer justo antes del inicio de la campaña electoral y el segundo tres días antes de las generales. El director de Recursos Humanos de Osakidetza, José Andrés Blasco, pidió ese gesto a las centrales para reducir la presión de negociar con la sombra de dos huelgas generales encima. Sin embargo, los sindicatos se mantienen a la defensiva y no hacen ninguna concesión.

ELA, central mayoritaria en el sector, ya ha mostrado su decepción con los primeros planteamientos de Osakidetza, al igual que UGT. El resto no se ha pronunciado, pero tienen claro que por encima de todo van a preservar la unidad de acción, que les garantiza una posición de fuerza a la hora de negociar.

La reunión de la mesa sectorial de ayer sirvió para poner en común las posturas de ambas partes y para que Osakidetza comprobase dónde puede haber algún atisbo de acuerdo. Blasco anunció a las centrales que el lunes les presentará una oferta "formal y por escrito" en la que quedará plasmada la "voluntad real" de Sanidad de alcanzar una solución. "Estoy seguro de que vamos a conseguir un acuerdo", resumió.

Solución duradera

Su intención es pactar con todos los sindicatos o, si no es posible, alcanzar un consenso mayoritario. "No vamos a cerrar el conflicto en falso, porque pretendemos buscar una solución sólida y con perspectivas de futuro", concluyó.

La portavoz de ELA, Nere Urrestarazu, constató que se ha registrado un cambio de actitud en las formas de Osakidetza a la hora de negociar, pero lamentó que no hay "un cambio en los contenidos en profundidad".Arantza Agote (UGT), Pilar Ortega (CCOO), Encarna de la Maza (SATSE) y Txaro Markinez (LAB) expresaron su voluntad de negociar, "pero no desde cero". Esas cinco centrales, junto con ESK, UTESE y el Sindicato de Auxiliares de Enfermería, sin representación en la mesa sectorial, ya que no alcanzaron los votos precisos para ello en las elecciones sindicales, exigen una redistribución de las tablas salariales, el desarrollo profesional en todas las categorías y la reducción de la carga de trabajo.