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Reportaje:

Rebelión en las filas de Sarkozy

Una secretaria de Estado y ex activista arremete contra la ley de inmigración del Gobierno francés

La "apertura" a la izquierda del presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha chocado finalmente con su política sobre la inmigración. Fadela Amara, la secretaria de Estado de Política de las Ciudades, fundadora de la organización Ni Putas ni Sumisas, rechazó ayer la enmienda que introduce en la legislación las pruebas de ADN para los inmigrantes que quieran acogerse al reagrupamiento familiar, y consideró "asqueroso" cómo se "instrumentaliza" la inmigración. Desde la Unión por un Movimiento Popular (UMP), su secretario general, Patrick Devedjian, le respondió que con sus declaraciones "insultaba" a los diputados de la mayoría gubernamental.

La pretensión de Sarkozy de abarcar un espectro político tan amplio que, por un lado, roza con las pulsiones xenófobas de la extrema derecha y por otro pretende integrar las exigencias morales de los grupos militantes por los derechos humanos, ha acabado reventando una costura del Gobierno. Fadela Amara, una mujer luchadora de origen magrebí, militante de SOS Racismo, cuya incorporación al Ejecutivo de François Fillon dio el definitivo marchamo de credibilidad a las proclamas presidenciales de apertura, entró finalmente ayer a saco contra la ley sobre el control de la inmigración que ha pasado ya todos los trámites para ser aprobada.

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En una entrevista radiofónica, Amara se declaró en contra de las pruebas genéticas porque "tocan algo que no es bueno para nuestro país". "Lo digo como hija de inmigrantes", añadió, "y estoy harta de que una y otra vez se instrumentalice la inmigración por razones muy precisas. Lo encuentro asqueroso".

También se declaró en contra de que el Estado pueda realizar estadísticas sobre el origen étnico de los franceses, algo que ahora está prohibido porque choca frontalmente con los principios constitucionales republicanos. "Crear categorías de población es peligroso", dijo.

Amenaza de dimisión

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Muestra de cómo empiezan a aflorar las tensiones en el heterogéneo Gobierno de Fillon, Amara no descartó la posibilidad de dimitir. "Soy una mujer libre, no lo olviden nunca", dijo. "Tengo la posibilidad de decir lo que tengo que decir y, francamente, el día en que esto sea insoportable, el día en que esto sea demasiado duro, pues me marcharé".

El ministro de Inmigración, Integración, Identidad Nacional y Codesarrollo, Brice Hortefeux, que hoy visita España para trabajar con las autoridades españolas en la "concertación bilateral" en los temas migratorios, defendió su proyecto de ley en la sesión de preguntas al Gobierno en la Asamblea Nacional, donde las declaraciones de Amara se convirtieron en arma arrojadiza entre los diputados de la UMP y los de la oposición de izquierdas.

El secretario general de la UMP, Patrick Devedjian, acusó a Amara de atacar al Gobierno e "insultar" a los diputados de la mayoría parlamentaria, pero se quedó a un paso de pedir su dimisión. "Yo no he dicho eso. Yo digo que no está bien", indicó. Desde el Partido Socialista (PS) fue exactamente esto lo que se pidió. Su portavoz André Vallini consideró que la secretaria de Estado debería ser consecuente hasta el final, y dimitir si la medida no desaparece del texto legislativo.

Martin Hirsch, el alto comisariado para la Solidaridad, que fuera director de la Fundación Abate Pierre, puede ser el siguiente en salir de las filas gubernamentales. La polémica ley del ministro Hortefeux incluye una disposición que impediría a los inmigrantes irregulares refugiarse en los centros de acogida temporal de urgencia en caso de necesidad.

Por el momento, Hirsch parece haber salvado la crisis. El lunes se reunió con asociaciones de ayuda a los inmigrantes y les garantizó que el Gobierno se ha comprometido a retirar de la ley el artículo en cuestión. La ley debe aprobarse en el pleno del Parlamento el próximo martes.

Fadela Amara, fundadora del movimiento Ni Putas ni Sumisas y miembro del Gobierno francés, en septiembre pasado.
Fadela Amara, fundadora del movimiento Ni Putas ni Sumisas y miembro del Gobierno francés, en septiembre pasado.AFP

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