Organismos internacionales y Gobiernos envían dinero, material sanitario, medicamentos y generadores de luz
El Gobierno peruano pidió ayer ayuda para hacer frente a las consecuencias del terremoto y la comunidad internacional, conmocionada por las escenas de destrucción que ha dejado el seísmo a su paso, respondió de inmediato a las peticiones de agua potable, alimentos y medicinas, principales demandas de las autoridades para aliviar la crisis que viven los cientos de miles de damnificados.
"No damos abasto para llevar agua por la magnitud de los daños", dijo ayer el jefe del Instituto Nacional de Defensa Civil, Luis Felipe Palomino, que también pidió que se envíe a Perú de forma urgente alimentos, vacunas antitetánicas, antibióticos y analgésicos.
Ante la tragedia, las agencias humanitarias de Naciones Unidas desbloquearon fondos por más de un millón de euros, según la oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en Ginebra. Por ahora, la OCHA ha destinado 370.000 euros y el Programa Mundial de Alimentos, otros 75.000. El programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y la Federación Internacional de la Cruz Roja han donado 75.000 y 186.000 euros, respectivamente, mientras que el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha enviado 370.000 euros (200.000 de ellos asignados a la primera fase de la reconstrucción). Las autoridades españolas también reaccionaron ante las peticiones de ayuda. Un primer avión con más de 100 toneladas de ayuda partió ayer por la tarde hacia Pisco desde la Base Aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid). El vuelo, fletado por la Agencia Española de Cooperación Internacional, lleva un cargamento de tiendas de campaña, material sanitario, medicamentos y generadores de luz para asistir a la población.
La Comisión Europea activó su mecanismo de protección civil y su centro de información para centralizar y coordinar la ayuda que destinen los países de la Unión Europea para los damnificados, entre ellos Italia, que destinó 200.000 euros a la Cruz Roja Internacional.
El Gobierno estadounidense también ha puesto de su parte. Washington anunció un desembolso de 74.000 euros para la compra y transporte de suministros de emergencia que se suma al equipo de cinco expertos que evalúan las necesidades en las comunidades más afectadas. La Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos expresó sus "profundas condolencias" ante el desastre, y en la capital estadounidense, la comunidad peruana recauda fondos para las víctimas apoyada por la embajada.
