Las empresas ahorrarán 300 millones anuales en sus gestiones burocráticas con la Administración
La Generalitat aprueba 48 medidas con las que promete aliviar los trámites administrativos
Informes, solicitudes, licencias. El papeleo, en resumen, se lleva unas 2.000 horas de trabajo anuales a cada empresa catalana y le cuesta unos 40.000 euros a cada una, ya sean una multinacional o una pequeña compañía. Por eso es uno de los principales quebraderos de cabeza del empresario. El Gobierno catalán aprobó ayer un paquete de 48 medidas con las que promete reducir esta carga al menos un 10%, según dijo en su día el presidente, José Montilla. Traducido a cifras: ahorrar la presentación de un millón de documentos, 90 días de trabajo. En euros contantes y sonantes, 300 millones.
La queja de los empresarios por el exceso de papeleo -y la pérdida de eficiencia que ello significa- viene de antiguo y no es exclusiva de los catalanes. Ni de los españoles, ya que, por ejemplo, abrir un negocio en España requiere casi el doble de procedimientos que en los países de la OCDE, según el Banco Mundial. La Comisión Europea ha detectado un buen número de trámites "inútiles" y exigido a los estados miembros que eliminen un 25% de las cargas administrativas hasta el año 2012.
El grano de arena que la Generalitat pondrá en esta batalla antiburocracia se aprobó ayer en forma de 48 medidas que afectan a 204 trámites y a siete de sus departamentos. Más operaciones por vía telemática y avanzar hacia la ventanilla única son los grandes pilares de un plan de simplificación administrativa que incidirá, en buena parte, en el proceso de solicitud de ayudas y subvenciones. Los frutos pueden demorarse, ya que algunas iniciativas serán inmediatas y otras requieren la modificación de leyes y decretos.
- Licencia ambiental. Sólo necesitarán una licencia ambiental previa para operar aquellas empresas que desarrollen actividades en Cataluña con un impacto ambiental "importante", aunque no quedarán exentas de cumplir con sus obligaciones para con el medio ambiente. La directiva europea exige que se extremen los controles sobre empresas de riesgo potencial, como las petroquímicas, las mineras y las nucleares, mientras que en Cataluña, hasta ahora, se les exige a todas.
- Código de buenas prácticas. El plan incluye la elaboración de un código de buenas prácticas que, de ahora en adelante, deberán seguir todos los departamentos de la Generalitat en su tarea legal para evitar duplicidades en los trámites y eliminar también todos aquéllos ya existentes que no aporten valor.
- Ventanilla única: la Oficina de Gestión Empresarial (OGE). Esta entidad, adscrita al Departamento de Universidades y Empresa, y creada en 1990, se consolidará como el principal referente de las empresas en todo lo relacionado con servicios de tramitación, información y asesoramiento. Su objetivo es concentrar en un solo punto los procedimientos que afectan a la actividad industrial relacionada con la seguridad, la salud y el medio ambiente.
- Telemática y 'front-office'. La Generalitat incrementará el número de procedimientos que puede resolverse a distancia, por vía telemática. También habrá más trámites que las empresas puedan solventar al momento, en lo que la jerga ha dado en llamar sistema front office.
Los trámites son iguales para una multinacional de 50.000 empleados que para un taller de 10. Por eso el impacto económico es tres o cuatro veces superior en las pequeñas y medianas empresas. Y también por eso, los representates del pequeño y mediano empresario, la mayor parte del tejido empresarial de Cataluña, fueron los primeros en salir ayer y felicitarse del plan de la Generalitat. El presidente de Pimec, Josep González, recalcó que la simplificación administrativa "es una petición histórica de las pymes que nosotros hemos presentado reiteradamente".
El presidente de la patronal vallesana Cecot, Antoni Abad, afirmó que se está "ante un cambio revolucionario y cultural de la propia Administración y Cataluña es pionera".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.