Merkel presenta su plan para una mejor relación transatlántica

La política exterior de la Unión quedó ayer relegada al furgón de cola de la cumbre ante las discusiones sobre las estrategias para combatir el cambio climático y sobre el contenido de la futura declaración de Berlín. Ello impidió que la canciller alemana, Angela Merkel, presentara durante la cena, como tenía previsto, sus planes para el reforzamiento del pilar económico de la relación trasatlántica ante la cumbre UE-EE UU de abril en Washington. En cena aparte, los ministros de Exteriores comunitarios se centraron en los temas de la agenda, con la novedad de volver a pasara revista a la situación en Irak, durante meses no tratada a escala comunitaria.

Merkel ya manifestó en su día que uno de los objetivos principales de su semestre presidencial era el potenciar la relación económica entre ambas orillas del Atlántico. Lo que pretende es cerrar con George Bush durante la cumbre euro estadounidense del 30 de abril un acuerdo que, idealmente, permita conseguir un mercado común trasatlántico en 2015. La cooperación reglamentaria, la energía, el medio ambiente, la propiedad intelectual, las inversiones, los mercados financieros o el transporte aéreo son algunos de los asuntos que Merkel tenía previsto presentar anoche a los otros jefes de Estado y de Gobierno comunitarios como materias de su futura discusión con Bush. Les hará partícipes de sus ideas esta mañana.

Berlín considera que armonización regulatoria y reducción de burocracia podrían generar miles de millones de euros de actividad económica y crear decenas de miles de nuevos empleos en un bloque económico que supone ya en torno al 60% de la economía mundial. "Ahorrará mucho dinero", dijo anoche Merkel.

La crisis de Líbano

En la cena los mandatarios si abordaron la situación en Líbano, lo que dio pie al presidente francés, Jacques Chirac, para pedir el compromiso europeo con un Líbano libre y democrático y el apoyo a la formación de un tribunal que juzgue el asesinato del ex primer ministro Rafik Hariri. La iniciativa de Arabia Saudí para acercar en La Meca a las enfrentadas facciones palestinas fue celebrada por los líderes europeos.

Líbano fue asimismo discutido por los ministros de Exteriores comunitarios, interesados en garantizar la integridad, la soberanía y la estabilidad del país levantino, como señaló el jefe de la diplomacia española, Miguel Ángel Moratinos. Los ministros aprovecharon la reunión convocada el sábado en Bagdad, que brindará la oportunidad de ver sentados a la misma mesa a representantes de Irán, Siria y EE UU, para tratar la situación en Irak "a los cuatro años de la intervención militar", en palabras de Moratinos.