La Xunta negocia con empresas la creación de siete centrales de biomasa

Las consellerías de Medio Rural e Industria se coordinarán para convertir en energía el millón de toneladas de residuos forestales que cada año se generan en Galicia. La Xunta negocia ya con varias empresas para que construyan plantas que produzcan electricidad con biomasa y prevé que las instalaciones empiecen a funcionar en dos años. La Administración ha identificado siete ubicaciones en las que el suministro de estos desechos vegetales estaría garantizado. Los propietarios de los montes recibirán ayudas para mecanizar la recogida y traslado del material.

"Con nuestro monte somos una potencia", proclamó el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, "y tenemos que ponerlo a producir de manera intensa". Tanto él como el responsable autonómico de Industria, Fernando Blanco, están convencidos de que la biomasa forestal puede salvar a Galicia de la dependencia energética y de la lacra del fuego. Los dos departamentos se unirán para facilitar la circulación de estos residuos y su transformación en energía térmica y eléctrica.

La Xunta ha identificado siete zonas idóneas para levantar una planta de generación de energía con biomasa. En estos puntos, las factorías podrían abastecerse sólo con los desechos generados por los montes públicos. El Gobierno gallego negocia con varias empresas para que construyan estas centrales de biomasa, que estarían ubicadas en suelo industrial de las comarcas de Xallas-Terra de Soneira, Terra Chá-Eume, A Fonsagrada-Meira, O Deza, Terra de Lemos-Chantada-Sarria, O Condado-Paradanta y Verín-A Limia.

El conselleiro de Industria está convencido de que no habrá problema para encontrar inversores y recordó que Fenosa y Endesa ya han manifestado públicamente su interés por este sector. La puesta en marcha de las instalaciones precisa 131 millones de euros y Fernando Blanco calcula que podrían estar funcionando dentro de dos años.

Por su parte, Medio Rural se encargará de crear un "circuito de recogida de biomasa residual" para suministrársela a estas plantas. La consellería dará ayudas para que los propietarios de los montes utilicen maquinaria específica de recogida, almacenaje y transporte de los residuos. El departamento de Suárez Canal invertirá 40 millones de euros en el desbroce y limpieza de los montes y en el tratamiento de la biomasa.

La Xunta promocionará además la instalación de calefacciones alimentadas con calderas de biomasa, tanto en las viviendas como en organismos públicos. Los responsables autonómicos insistieron ayer en que todo este dispositivo para valorizar los residuos forestales no interferirá en el aprovechamiento que ya hace la industria maderera de estos desechos.

El Gobierno gallego considera que su Plan Técnico de Aproveitamento Enerxético da Biomasa Forestal, en el que están englobadas todas estas medidas, servirá como "antídoto" contra los incendios, creará empleo en las zonas rurales y reducirá las emisiones de los gases causantes del cambio climático. El programa precisa una inversión total de 171 millones de euros y de ellos 131 tendrán que ser aportados por las empresas privadas para construir las siete plantas de biomasa previstas.