Anuncios en entredicho
Decenas de campañas reciben cada año reclamaciones por dar una imagen sexista de la mujer. El último caso, el de Dolce & Gabbana
Un gran escote y una silueta femenina. La publicidad encuentra irresistible el cuerpo de la mujer. Caramelos, desodorantes, coches, bebidas alcohólicas. Muchos productos recurren a las curvas para atraer al consumidor.
El pasado lunes, el Instituto de la Mujer exigió la retirada de un anuncio de Dolce & Gabbana . "Una publicidad sexista y que incitaba a la permisividad de la violencia contra las mujeres", según la directora de ese instituto, Rosa María Peris. El anuncio había recibido más de 30 reclamaciones en 48 horas.
"Es un tema delicado. La empresa no tiene una posición oficial y los diseñadores no quieren decir nada", explicó ayer un portavoz de la firma. Sin embargo, un día antes, según la agencia de noticias Ansa, los diseñadores declararon en un desfile de moda en Milán que "España se ha quedado un poco atrás" en estos temas. Tras la polémica, la empresa ha decidido retirar el anuncio del mercado español. Una decisión aplaudida por el Instituto de la Mujer y asociaciones feministas y de consumidores. Peris explica que, como en este caso, los anunciantes suelen retirar sus campañas o modificarlas.
Pero estos modistos italianos no han sido los únicos criticados por su uso indiscriminado del cuerpo femenino. El Observatorio de la Imagen de la Mujer recogió en 2005 más de 400 denuncias a 181 campañas por sexismo. El motivo, "la utilización de la mujer como reclamo y objeto de deseo".
Una mujer se come un caramelo y poco después los botones de su escote estallan. Es la secuencia de un anuncio de Chupa Chups, uno de los denunciados. "Intentamos no usar contenidos sexistas. Aunque a veces es recurrente poner a una chica guapa, pero también a un tío bueno, como en el anuncio de Coca Cola Light", explica Miguel Madariaga, creativo de la agencia SCPF. Pero los anunciantes siguen prefiriendo a las mujeres y las curvas para vender centros de estética, productos de belleza y bebidas, sectores que atrajeron el mayor número de reclamaciones en 2005.
"Nos fijamos en los anuncios por el sexo, pero se nos pasan otros que fomentan estereotipos", opina Empar Pineda, portavoz del grupo Las Otras Feministas. Se refiere al recurso común de la mujer sólo como ama de casa, o a otro de los denunciados en 2004: "Hay dos cosas que nosotras no podemos evitar: llorar y salir de compras", decía el eslogan de un anuncio de la tienda de ropa Podium. "Roles que hay que erradicar desde dentro", según Peris. Para ello, el Instituto creará una Comisión Asesora junto a anunciantes, agencias de publicidad y consumidores.
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