Prueba en los centros de salud para detectar a los pacientes que beben en exceso

El programa Beber Menos ya es una realidad en los centros de salud catalanes. Beber Menos es una iniciativa que permite detectar a aquellas personas que son bebedores de riesgo, es decir, hombres que toman más de 14 combinados a la semana o, en el caso de las mujeres, más de ocho. En total se han formado 8.000 médicos y enfermeras para ponerlo en práctica. El profesional sanitario elige a aquellos pacientes que quieren someterse a la prueba y los encuesta. Si el cuestionario determina que esa persona bebe en exceso, se le da un consejo breve y se le hace un seguimiento.

"No consiste en decirle que beber es malo, sino en motivarlo para el cambio de hábitos, pactar el consumo y darle trucos para disminuirlo", explicó ayer Joan Colom, responsable de Drogodependencias del Departamento de Salud, durante la inauguración del XII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Toxicomanías. "La prioridad de esta iniciativa no es atender al alcohólico, sino a aquella persona que no es consciente de que bebe en exceso", subrayó Colom.

En un estudio, se realizó una encuesta del programa Beber Menos entre unos 1.200 ciudadanos que acudieron a 28 centros de salud elegidos aleatoriamente. El 20% de los que se sometieron a la prueba eran consumidores excesivos de alcohol. Precisamente, el 3,4% de las visitas en la atención primaria está ocasionadas por problemas con esta sustancia.

A lo largo de 2005, un total de 14.236 personas iniciaron algún tipo de tratamiento de desintoxicación de drogas en la comunidad catalana, el 41,5% de ellos a causa del alcohol, el 27% por la cocaína, el 13,7% por la heroína, el 8,2% por el tabaco y el 3,9% por el cannabis.

Precios de medicamentos

Por otra parte, Joan Duran, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, anunció ayer que con la nueva orden sobre precios de referencia, que entrará en vigor el próximo 1 de marzo, cada farmacia de Cataluña dejará de ingresar 6.000 euros. En total, 16 millones de euros si se suman las 3.000 farmacias que hay en Cataluña. Duran atribuye las pérdidas a la implantación de la nueva ley, ya que ésta no prevé un periodo de coexistencia entre el precio de los medicamentos nuevos y los antiguos. Duran explicó que la mayoría de medicamentos no llevan grabado el precio en el envase y que, por tanto, no pueden devolverse a fábrica, informa Laura Clavijo.