Barricas a su gusto

El grupo Rivercap empezó en los años noventa con apenas una decena de trabajadores. Hoy la plantilla de esta compañía alavesa especializada en aplicar la innovación a nuevas técnicas de ayuda a la elaboración y conservación del vino asciende a 175 profesionales. Con los años, esta empresa familiar, en manos de su fundador, Enrique Echepare, se ha diversificado en cuatro compañías y su facturación alcanza los 23 millones de euros.

Rivercap nació en los años noventa con una decena de trabajadores. Entonces producía 20 millones de cápsulas al año, hoy fabrica 500

El grupo se ha diversificado en cuatro compañías con negocios diferentes: cápsulas y tapones; I+D; tonelería e integración de roble

Cuando Enrique Echepare habla del Tostado Rotativo Horizontal (TRH) de las barricas le brillan los ojos. Es su última apuesta, la niña mimada. En definitiva, se trata de aplicar el sentido común y la tecnología a la creación de las barricas para la crianza del vino. "¿Por qué quemar la barrica de manera vertical si el aire caliente sube para arriba? Se pierde mucho calor, además, dependiendo del fuego y las condiciones atmosféricas y de cómo haya dormido el operario, la barrica sale más ahumada, o menos trabajada", reflexiona.

En Tonelería Quercus, una de las empresas del grupo Rivercap, se ideó un sistema basado en una resistencia que genera calor pero que no deja restos de humo y que sirve de centro de referencia a la barrica, que gira a su alrededor. Con esto se consigue una mayor penetración del tostado (que durante la crianza del vino es lo que aporta los aromas para redondear el producto final) y que estos sean a la carta. O dicho de otra manera, que se pueden hacer un número de barricas ilimitado con las mismas condiciones, según el gusto y las necesidades del bodeguero, algo impensable con el método tradicional. Es una novedad que ya tiene patente europea.

"Rivercap nació en los años noventa cuando trabajábamos entre 10 y 20 personas para producir 20 millones de cápsulas al año y ahora trabajamos más de 170 personas y producimos 500 millones, el 20% de la producción mundial en cápsulas de estaño", recuerda su fundador, Enrique Echepare, que ha diseñado y construido la maquinaria que utiliza.

Empresa familiar

El grupo se ha diversificado en cuatro empresas: Rivercap (cápsulas y tapones de rosca); Uniriver (I+D+i para bodegas); Tonelería Quercus y River-OAK (integración del roble). Todo esto en una empresa familiar en la que conviven la primera y la segunda generación, que emplea a 175 personas y que en el año 2005 facturó 23 millones de euros.

Otra de las creaciones de Echepare son los Barrel Box, unos depósitos para vino transportables y apilables que rompen con el diseño tradicional de líneas cónicas para apostar por las pentagonales y hexagonales. De esta manera, según se prefiera mantener las condiciones del vino existe la opción de recambiar la madera que forma cada uno de los lados. Por ejemplo, cada año cambiar una pared. Así se aprovecha al máximo el depósito y no los actuales, que tienen un límite de vida. Además, ocupan siete veces menos

En Rivercap se trabaja a la carta. Y es que cada bodega reclama un tipo de cápsula determinada para sus botellas, con sus colores, diseños y relieves propios. Un cliente, una cápsula. Un tercio de la fabricación de gama alta se vende en España, otro tercio en Francia y otro en Estados Unidos. Gracias a su departamento de I+D+i se han ido sentando las bases de una empresa líder, primera en sacar al mercado la cápsula aligerada de 80 micras, la instalación de la colada y laminación continua de estaño con maquinaria propia y un sistema de superlimpieza interna y externa de la cápsula que aumenta la adhesión al cuello de la botella y beneficia la adherencia de las tintas. Además, está fabricando y comercializando las cápsulas de rosca, muy demandadas en Estados Unidos, Australia y el mercado anglosajón del vino.