La mayor recaudación de la historia de Christie's

Todos los presagios que planeaban sobre la subasta celebrada en la sede neoyorquina de Christie's el pasado jueves se cumplieron. Pese a la precipitada retirada del que iba a ser el cuadro estrella de la noche, El bebedor de absenta de Picasso, por posibles conflictos legales, la tarde se zanjó con el desembolso de 385 millones de euros, la mayor recaudación de la historia en una subasta de arte moderno. Y sin Picasso como contrincante, fue Gustav Klimt quien ocupó su puesto. El retrato Adele Bloch-Bauer II (1912) se puso a la venta por 19 millones de euros y tras una furiosa batalla entre dos compradores, y la entrada de un tercero cuando el precio ya había ascendido vertiginosamente de millón en millón hasta los 70, el lienzo acabó siendo adquirido por teléfono por un anónimo en 87.9 millones de euros. Era otra versión en tonos azulados del Adele Bloch-Bauer I, el retrato por el que el magnate de los cosméticos y fundador de la Neue Gallery de Nueva York Ronald Lauder pagó en una transacción privada el pasado junio 105 millones de euros. Hasta entonces, el record de Klimt estaba en sólo 23 millones de euros. La octogenaria María Altmann, su propietaria, sobrina de la mujer retratada por el pintor austríaco, compareció ante la prensa minutos antes de que arrancara la subasta. "Estoy muy emocionada" dijo. Además del retrato, Altmann, famosa por la disputa con la que le arrebató las obras al gobierno austríaco, ofrecía en la subasta otros tres cuadros de Klimt con los que aspiraba a conseguir al menos 109 millones de euros. Al final, se fue a casa con una cifra aún más indecente: Apple Tree I (1912) se vendió por 25.8, Houses at Unterachon the Attersee (1916) se vendió por 24.2 y Birch Forest (1903) obtuvo 40.3.

Pero la noche también fue histórica para otros siete artistas. El cuadro de Paul Gauguin L'homme a la hache se vendió por 31.4 millones de euros, el excepcional Berliner Strassenszene (recto) Baume (verso) (1913-1914), de Ernest Ludwig Kirchner, se vendió por casi 29.7 millones de euros. Además Piet Mondrian, Pierre Bonnard, Balthus y Pierre Auguste Renoir también alcanzaron precios históricos.