El retraso en adoptar el soporte digital aumentó la crisis
El 1 de julio se cumplirán cinco años del cierre de Napster. Fue la gran victoria de la industria discográfica sobre el primer sistema de distribución musical entre ordenadores, el popularmente llamado P2P. Sin embargo, cinco años después, las ventas de la industria discográfica siguen cayendo y florecen los sistemas P2P, como eMule, BigTorrent, LimeWire...
A ellos les achaca la industria del disco su crisis, con parte de razón ya que, según la IFPI, organización mundial de la industria discográfica, el pasado año había en Internet 885 millones de archivos musicales disponibles; pero también reconoce que ahora hay un 20% menos de archivos ilegales que hace tres años y, sin embargo, la crisis de la industria del disco continúa.
La llegada de Internet y la tecnología digital pilló a la industria discográfica descolocada; en todos estos años no ha sabido cómo enfrentarse al nuevo reto. Y cuando lo hizo fue más como enemigo que como socios de un nuevo negocio. La relación se ha ejecutado más en los juzgados que en los despachos.
Los intentos de las discográficas por vender en Internet se cuentan por fracasos. Sony tiene su comercio de discos en la Red, también los otros grandes sellos; pero cada cual pone en venta la música de sus artistas. ¿Alguien va a una tienda donde sabe que sólo va a encontrar los discos de un sello o los libros de una editorial? Los internautas no respaldaron estos intentos de comercio electrónico. Además, en esas tiendas sólo se vendían discos completos y, si se adquirían, había luego dificultades para pasar la música comprada a otros formatos (del ordenador a un CD virgen por el que, además, el consumidor paga un canon extra).
El triunfo de iTunes
La esperanza llegó con la tienda musical de Apple iTunes, que tiene en Estados Unidos el 75% del mercado gracias a su conexión con el aparato iPod. Esta tienda consigue que la gente compre música a la carta. La venta de un disco ha pasado a la historia (tampoco su protagonismo ha perdurado más de 40 años).
En 2005, el 75% de todas las ventas de singles fue digital; en 2004, era el 45%. Hoy, las ventas musicales en la Red suponen el 6% del total, muy poco pero el doble que el año anterior (siempre según la IFPI). En Estados Unidos, estas ventas suponen el 9%, y en España, sólo el 1%. Sin embargo, todos coinciden en que el único futuro para la industria discográfica es la tecnología digital, Internet y hasta el P2P, legal, por supuesto.
Mientras tanto, sigue habiendo grandes lagunas que el consumidor llena como puede. Por ejemplo, es imposible comprar la música de los Beatles en Internet. Y cuanto más tiempo se deja al consumidor esperando en una cola, aumentan las probabilidades de que se vaya o de que se distraiga algo de género.
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