El cielo entero parecía deshacerse en agua la mañana del último día de Selectividad. Entre los 23.000 alumnos que terminaban en Madrid el jueves pasado estas pruebas estaba Alba Gañán (17 años), que no parecía preocupase del diluvio. Tampoco estaba muy nerviosa por el examen. La máxima preocupación de Alba es, sin embargo, si podrá ir a la universidad el próximo curso.
Hace sol, mucho sol, y dentro de poco los centros públicos de enseñanza cerrarán sus puertas y cesará toda actividad en ellos. Toda no; los paneles solares fotovoltaicos colocados en cerca de medio centenar de colegios e institutos de España gracias al programa Solarízate seguirán produciendo electricidad, volcándola a la red y evitando emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.
J. A. A. | Madrid
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