El Parlamento analizará la próxima semana el conflicto sanitario

Los sindicatos con representación en el sector acudirán el próximo jueves a la Comisión de Sanidad del Parlamento para exponer su visión sobre lo que está ocurriendo en el Sistema Vasco de Salud y las causas del conflicto actual. La comparecencia se produce a petición del Partido Popular, cuyo parlamentario Carmelo Barrio considera necesario que la Cámara conozca de primera mano lo que piensan los sindicatos. "Cuando casi todas las centrales se han unido contra el consejero [Gabriel] Inclán es que algo no funciona", ha señalado Barrio. "Ya no se trata de las quejas de un determinado colectivo, sino que es prácticamente el conjunto el que se enfrenta al departamento. Hay que reflexionar profundamente sobre lo que está ocurriendo", añade.

El propio consejero intervendrá ante la misma Comisión de Sanidad el próximo lunes, aunque no será para hablar de la huelga. Está previsto que informe sobre la viabilidad de realizar ensayos terapéuticos con heroína en la comunidad autónoma. Su intervención coincidirá con el desarrollo de la segunda jornada de paro general convocada en Osakidetza por ELA, el Sindicato de Enfermería (SATSE) y ESK.

La dirección del Servicio Vasco de Salud ha convocado una reunión con estas centrales para el próximo martes en un intento de acercar posturas y desbloquear la negociación, encallada tras las últimas citas.

El director de Recursos Humanos del Servicio Vasco de Salud, José Andrés Blasco, reconoció ayer la imposibilidad de parar la convocatoria del lunes. "Los contactos se mantienen, pero es complicado parar la rueda cuando está cayendo por la cuesta", aseguró.

Garantía de atención

Blasco indicó que es necesario que haya más "tranquilidad" para que las dos partes se sienten a negociar. En esta línea, hizo hincapié en lo "poco que ayudan" hechos como los carteles con el texto Osakidetza cierra por huelga con el que los sindicatos empapelaron algunos centros.

La directora general del servicio, Gloria Quesada, transmitió a la población el mensaje de que el sistema ha funcionado "muy por encima" de los servicios mínimos. "Los ciudadanos tienen que saber que si acuden a Osakidetza el lunes van a tener todas las garantías de ser atendidos. Y eso ha quedado claro tras comprobar que sólo un 10,91% de la plantilla ha secundado el paro de hoy [por ayer]", apuntó.

Las dos huelgas previstas para la semana entrante (los próximos lunes y el viernes) pondrán otra vez a prueba la capacidad del sistema público de Euskadi para aguantar la presión y el poder de convocatoria de los sindicatos para movilizar a los trabajadores descontentos. "Una huelga es el peor de los escenarios porque supone que el enfrentamiento ha llegado al máximo", se lamentó Gloria Quesada.