El consumo eléctrico podría cubrirse con energías limpias antes de 2050, según Greenpeace

Las energías renovables podrían cubrir la demanda energética española. De hecho, existe la capacidad técnica para que en 2050 generen 56 veces la electricidad que gastará entonces la población, que se calcula en poco más de 38 millones. Así lo planteó la organización ecologista Greenpeace en Renovables 2050: un informe sobre el potencial de las energías renovables en la España peninsular. El Gobierno tiene como objetivo que en 2010 las renovables representen el 12% de la energía (ahora representa algo más del 6%). Un portavoz del Ministerio de Medio Ambiente afirmó que el horizonte de 2050 es demasiado lejano.

El sol sería la fuente de energía renovable más abundante para España, según el estudio que Greenpeace encargó al Instituto de Ciencias Tecnológicas de la Universidad Pontificia de Comillas. En teoría, con las tecnologías solares disponibles hoy, en 2050 se podría obtener el equivalente a más de ocho veces la demanda energética total, unos 1.525 teravatios-hora.

Sólo con la tecnología solar termoeléctrica se podría generar 35 veces la demanda eléctrica española para 2050 -unos 280 teravatios-hora al año-, con la eólica terrestre se podría obtener ocho veces esa cantidad; con la solar fotovoltaica con seguimiento, cinco veces, y con la chimenea solar, tres.

Para el director de Greenpeace, Juan López de Uralde, que las energías renovables cubran toda la demanda energética, o al menos eléctrica, es "técnicamente viable, ambientalmente limpio y socialmente deseable". "La clave está en combinar las diferentes tecnologías", asegura el responsable de Energía de la organización ecologista, José Luis García Ortega. Si se crean instalaciones para generar energía equivalente al 178% del consumo eléctrico, se podría cubrir la demanda. Aunque no todas las fuentes funcionan a la vez (un día hace sol, pero no viento), si hay suficiente potencia instalada, una fuente suple a otra. En esta "combinación ideal", más de la mitad corresponde a tecnologías solares, casi un 20% a eólicas y un 10% a biomasa.