_
_
_
_

Algunos momentos clave

A Josep Pla le preocupaba la República. Asistió en Madrid a sus primeros pasos en 1931, como cronista parlamentario, y escribió mucho sobre el tema para varios periódicos. En su primera crónica, publicada en La Veu de Catalunya el 18 de abril de 1931 y bajo el título de El 14 de abril en Madrid, Pla escribió: "A las tres de la tarde del día 14 se izó en Madrid la primera bandera republicana, que tremoló sobre el Palacio de Comunicaciones. Esta bandera produjo un movimiento general de curiosidad que se convirtió en un estallido de entusiasmo al conocerse que representaba realmente lo que simbolizaba, o sea, la toma del poder por parte del Gobierno provisional. En cuanto esto se hizo público, Madrid corrió a destruir y a esconder los símbolos monárquicos. Los comerciantes proveedores de Real Casa, las tiendas con el escudo real, las fondas, teatros y restaurantes con algún nombre relacionado con la Monarquía, hicieron desaparecer rápidamente los nombres comprometedores y dinásticos. Las estatuas que el pueblo consiguió derribar cayeron de forma implacable. (...) El pueblo de Madrid, que suele poseer una finura crítica indudable, aderezó el espectáculo con su causticidad proverbial. El Rey y la Reina no fueron tratados por la masa con cumplidos, pero tampoco con una crueldad exagerada. Todo el entusiasmo popular tuvo casi siempre un aire de verbena: a veces en la Puerta del Sol llegó a adquirir una densidad emotiva profunda e inolvidable. La gente estuvo correctísima y la propiedad fue absolutamente respetada (...)".

Cuando estalla la huelga de Asturias de octubre de 1934, Josep Pla viaja allí como enviado especial. En su crónica, publicada en La Veu de Catalunya el 24 de octubre, Pla cuenta sus primeras impresiones: "He podido llegar a Gijón, vía Santander-Llanes. En Llanes, la vía del tren se interrumpe, y he tenido que alquilar un taxi que me ha traído, por Ribadesella, hasta aquí. Es el único camino natural y practicable para llegar a Oviedo. Dudo que ningún periodista haya podido llegar por un camino diferente. Lo primero que he de advertir es que la inmensa mayoría de las informaciones sobre la situación en Asturias son indirectas y generalmente inventadas. Gijón está en paz. Los soldados de Infantería de marina protegen a la población. Hay un gran movimiento de tropas en la calle (...) El barrio alto de la ciudad -Cimadevilla, barrio de pescadores- fue bombardeado por el crucero Libertad. Hay una docena de casas destruidas. Una estampa de la gran guerra".

En uno de sus últimos artículos, Pla comenta el triunfo del Frente Popular del 16 de febrero de 1936. Publicado también en La Veu de Catalunya el 3 de marzo, el periodista ampurdanés escribió: "El domingo se celebró en Madrid la gran manifestación para exteriorizar la alegría del triunfo del Frente Popular. Reafirmando lo que pasó en la manifestación del sábado, se vieron más banderas rojas que republicanas. Se asistió a una parada militar de las juventudes comunistas y se tuvo la sensación de que el tono del Frente Popular lo da el extremismo social. (...) Nos encontramos en un momento caracterizado por una gran preocupación, sobre todo entre los partidos de izquierda republicana que triunfaron el día 16 de febrero y que no saben cómo contener a sus masas".

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_