Cultura complica los proyectos de Elorza para el Palacio de Aiete y la antigua Fábrica de Gas

El Departamento de Cultura ha incoado un expediente para declarar bien cultural calificado, con categoría de monumento, el Palacio de Aiete de San Sebastián y sus jardines. La decisión ha irritado profundamente al alcalde, Odón Elorza, ya que choca con sus planes para levantar allí una casa de cultura y un instituto de derechos humanos. El Ejecutivo está además dispuesto a aceptar el traslado del edificio y los elementos protegidos de la antigua Fábrica de Gas donostiarra, pero sólo unos metros, no a la ubicación propuesta por el Ayuntamiento. Elorza calificó ayer la idea de "pacata".

El Gobierno abrió anteayer el procedimiento legal para catalogar el Palacio de Aiete y los jardines que lo rodean, tras la petición presentada el pasado mes de septiembre por un grupo de particulares contrarios a la intervención en el edificio y sus aledaños, según explicó ayer el viceconsejero de Cultura, Gurutz Larrañaga.

La incoación del expediente se publicará en un par de semanas en el Boletín Oficial del País Vasco. A partir de ese momento, los interesados tendrán un plazo de veinte días para presentar las alegaciones que estimen oportunas. En cualquier caso, y a la espera del grado de protección definitivo, la simple apertura del procedimiento ya implica la aplicación provisional del régimen de protección previsto en la ley de patrimonio cultural vasco.

Además, desde el mismo momento en que queda abierto el expediente, cualquier actuación en el Palacio de Aiete y en sus jardines requerirá un informe "preceptivo y vinculante" de la Diputación de Guipúzcoa, advirtió Larrañaga. El viceconsejero recalcó que el departamento "no cierra las puertas a ningún proyecto", pero insistió en que éste tendrá que tener en cuenta que el edificio y sus alrededores son desde ahora "un bien cultural con previsión de obtener la categoría de conjunto monumental".

El expediente, sin embargo, fue acogido con un notable enfado por el alcalde donostiarra, ya que, en la práctica, frustra sus planes para habilitar un instituto de derechos humanos en el palacio y construir una casa de cultura semisoterrada bajo el jardin trasero del edificio. "Acuso a la consejera de Cultura, Miren Azkarate, de perjudicar de modo notable a San Sebastián. Siento vergüenza por su actitud, porque trata de impedir el desarrollo de una gran casa de cultura y un instituto de derechos humanos", enfatizó Elorza.

"Castigo político"

El primer edil sostiene que la decisión de Cultura de proteger precisamente ahora el Palacio de Aiete y sus jardines, cuando "se da cuenta de lo que quiere hacer el gobierno municipal", encabezado por el PSE, responde a "una jugada de castigo político" en la que se habrían puesto de acuerdo el Ejecutivo y la Diputación para "obstruir" los planes locales. "Al PNV le gusta castigar a la ciudad por sectarismo puro", aseguró, y se preguntó "cuál es la explicación para que el dinero de Cultura se vaya casi siempre a Bilbao".

Como apoyo a sus palabras, Elorza esgrimió una lista facilitada por el departamento el pasado agosto que cita los bienes culturales de la ciudad con interés desde el punto de vista arquitectónico y las zonas de interés arqueológico. En ella "no figura el Palacio de Aiete", destacó.

El alcalde aseguró que su equipo de gobierno mantendrá la partida de seis millones de euros que tiene reservada para la casa de cultura y el instituto de derechos humanos y adelantó que planteará "iniciativas administrativas y jurídicas" para, a pesar de todo, intentar sacar adelante su proyecto. "No nos vamos a rendir", subrayó.

El grupo municipal del PP afirmó que la decisión de Cultura "obliga a buscar alternativas" para la casa de cultura de Aiete. "No deja resquicio de duda. El proyecto de Elorza no tiene viabilidad alguna", apuntó el edil popular José Luis Arrúe. Por ello solicitó al primer edil que inicie los trámites para construir la casa de cultura en la parcela de Jolastoki.

La postura de la consejería respecto a la antigua Fábrica de Gas -en cuyo solar, de titularidad municipal, Educación va a construir un colegio- tampoco ha satisfecho a Elorza. El primer edil propuso al Gobierno vasco que permitiese trasladar a Miramón, junto al Museo de la Ciencia, los elementos protegidos como monumentos de la factoría, es decir, el gasomotor, el edificio que lo alberga y el gasómetro.

Cultura respondió ayer que está dispuesto a autorizar el traslado de estos elementos, pero sólo a unos metros de su ubicación actual, a fin de velar por su protección y puesta en valor "en su entorno natural".

El viceconsejero recordó además que el coste del traslado corre a cargo del propietario, en este caso, el Ayuntamiento, quien, eso sí, podrá pedir una subvención al Gobierno vasco. El alcalde tachó de "pacata, pobre y triste" esta postura de la consejería, ya que "va a hacer que el gasomotor quede dentro del patio de juegos del colegio, lo cual es un error".