Raimon Masllorens y Ana Fernández presentan en Málaga 'Sin ti', un filme sobre la superación

Ana Fernández encarna en Sin ti, segundo largometraje del director catalán Raimon Masllorens, a una madre de familia que se enfrenta a sí misma en su lucha por asumir su repentina ceguera, un papel que la actriz sevillana no dudó ayer en considerar "el más hermoso y agotador" de su carrera tras la presentación de la cinta en el Festival de Málaga.

Junto a Ana Fernández, el filme cuenta con las interpretaciones de Pep Munné, Carolina Pfaffenbauer y Quim Gutiérrez, compañero de penurias de la protagonista. Masllorens plantea en Sin ti, rodada en Barcelona, la capacidad de superación de ciertas personas ante repentinas adversidades que truncan sus vidas. El director catalán aseguró que esta historia es la de las segundas oportunidades que siempre da la vida. "Es la otra opción a la fatalidad", afirmó. Masllorens indicó que, gracias a la ardua labor de los guionistas -Alicia Luna y Pau Garsaball-, la realización de la película "se hizo fácil", pese a los casi cinco años invertidos en trabajar el guión. "Delimitar el personaje de Ana ha sido un esfuerzo titánico, pero era importante porque sobre él descansa el peso de la película", explicó el director.

"El personaje de Lucía vive en la luz pero desde la oscuridad. Tras su repentina ceguera se da cuenta de lo que de verdad quiere hacer en la vida. Es la historia de un resurgir", señaló Masllorens, que resaltó la importancia de la evolución pareja que sufre el entorno de la protagonista y sus distintas formas de enfrentarse a un imprevisto de tal calibre.

Como si fuese ciega

"Este personaje me poseyó durante un tiempo", recordó Ana Fernández, que regresa al Festival de Málaga después de que el pasado año concursase con Morir en San Hilario, de Laura Mañá. La ganadora de un Goya por Solas contó que durante el rodaje en Barcelona actuó como si fuese ciega de verdad, "caminando por las calles y moviéndome en mi apartamento como si no viera". "Soy muy buena ciega. Actuando así se me abrió un mundo que desconocía. Descubrí a una Ana que no sabía que estaba ahí (...) Y eso es gracias a un monitor de la Once, al que debo el 50% del personaje", reconoció la actriz, que aseguró haber sufrido una presbicia debido a que desenfocaba constantemente la visión con el fin de "conseguir una mirada ciega creíble".

En otro orden de cosas, el presidente de la Federación de Asociaciones de Productores Audiovisuales de España (FAPAE), Pedro Pérez, reclamó ayer al Gobierno que impulse un nuevo marco legal (Ley Audiovisual) que cubra las necesidades reales de la industria cinematográfica española y que contribuya a mejorar el panorama del sector en el país.