La galería Barbié revisa las vanguardias clásicas del siglo XX

Cubismo, suprematismo y surrealismo, tres de los movimientos clave de las primeras vanguardias del siglo XX, protagonizan la exposición El desafío de la modernidad, abierta en la galería Manuel Barbié de Barcelona (Consejo de Ciento, 321) hasta finales de diciembre. La muestra celebra los cinco años de la galería y reúne obras de destacados artistas como Alexandra Exter, Liubov Popova, Laurens o Juan Gris, entre otros.

La exhibición, que reúne un extraordinario conjunto de 12 pinturas y tres esculturas, celebra los primeros cinco años de la nueva etapa de la galería que, bajo la dirección del hijo del fundador Manuel Barbié Gilabert, ha dirigido su interés hacia el arte del siglo XX, centrándose precisamente en estos tres momentos de las vanguardias históricas. "El objetivo de esta exposición es llenar un hueco en el panorama expositivo barcelonés con obras que no se suelen ver ni siquiera en los museos. Todas proceden de grandes colecciones privadas europeas y estadounidenses y son inéditas en el mercado, es decir, que no se han exhibido en galerías ni en subastas", explicó Manuel Barbié Nogaret, que en 1999 asumió la dirección de la galería, fundada por su padre en 1965.

Cada sección está formada por cuatro pinturas y una escultura, y todas están a la venta: las más económicas (50.000 euros) son dos pequeños óleos de Alexandra Exter y la más cara un gran lienzo lleno de color y dinamismo de Liubov Popova, que procede de una colección de Londres. "A Popova y Exter, dos de las mejores pintoras de la primera abstracción, Barbié dedicó una exposición monográfica hace un año", recordó la crítica de arte Victoria Combalia, autora del texto del catálogo que recorre la historia de la galería. En la sección dedicada al suprematismo se exhiben también una pequeña escultura de Malevich, cotizada en medio millón de euros; una pintura de Ivan Puni inspirada en la técnica del collage, y un Proun de El Lissitzky, una serie de obras centradas en el análisis de la transparencia, el color, la forma, la línea y la materialidad.

Juan Gris encabeza la selección cubista con un lienzo que ya ha sido adquirido por una colección barcelonesa, aunque Manuel Barbié no quiere dar más detalles al respecto. En este apartado se exponen también una tela de Henry Hayden y una escultura en piedra de Henri Laurens, que dio origen a una serie de terracotas, una de las cuales se conserva en el Centro Pompidou de París.

Una fotografía de Man Ray, la única pieza que ya se presentó en Barcelona en el marco de una exhibición de la galería comisariada por Combalía, abre la sección dedicada al surrealismo. La acompañan un lienzo paradigmático de la trayectoria de Giorgio de Chirico y la pintura de una niña dormida realizada por Miró en 1935, que se expuso en público por última vez en el Pompidou en 1968. La selección se completa con una pintura de Yves Tanguy de 1938 y con una escultura de formas onduladas y sinuosas en mármol blanco de Jean Arp.