"Hemos incorporado a la educación a casi cuatro millones de excluidos en dos años"
En Venezuela, la mitad de sus 26 millones de habitantes están estudiando. Para el ministro venezolano de Educación, Cultura y Deporte, Aristóbulo Istúriz (Estado de Miranda, de 58 años), el reto de la enseñanza en su país es consolidar un nuevo sistema educativo al que han dado el nombre de bolivariano. Istúriz, que acudió a la XX Semana Monográfica de la Educación de la Fundación Santillana celebrada recientemente en Madrid, explicó que en Venezuela están debatiendo en estos momentos una nueva ley orgánica de educación que dé soporte legal a iniciativas que ya se están llevando a cabo, como dar desayuno, comida y merienda gratis a los alumnos de educación básica, recuperar a los excluidos del sistema o llevar la educación superior a todos los rincones del país.
"En la formación básica [de 7 a 12 años] los niños reciben desayuno, almuerzo y merienda gratuitos en las escuelas"
"Queremos que todos los alumos que lleguen a primaria en 2007 hayan pasado antes por la educación preescolar"
Pregunta. ¿En qué se está centrando el debate sobre la nueva ley de educación?
Respuesta. Nosotros [el Gobierno dirigido por Hugo Chávez] defendemos la presencia del Estado docente, contra los que defienden la concepción liberal de la educación.
P. ¿En qué se concretan las reformas?
R. En primer lugar, estamos buscando la universalización de la educación preescolar para 2007. Queremos que todos los niños que lleguen a primaria hayan pasado por preescolar, porque una de las bases del fracaso es que los niños no llegan bien preparados a la educación básica.
P. Y cuando lleguen a primaria (de siete a 12 años), ¿qué se encontrarán?
R. Encontrarán una escuela para la formación integral, a tiempo completo y con profesores con dedicación exclusiva. El maestro que antes trabajaba por la mañana en la escuela pública y por la tarde en la privada ahora ha de tener dedicación exclusiva, y para eso hemos incrementado su salario un 60%. Para los niños también será a tiempo completo. Para eso, hemos puesto en marcha el programa de alimentación escolar, mediante el que los alumnos desayunan, almuerzan y meriendan gratis en las escuelas. Un grupo de madres prepara los alimentos. Son las madres procesadoras, a las que estamos organizando en cooperativas de consumo para que también compren la comida. No basta con tener la escuela y el maestro, no basta la igualdad de oportunidades, tenemos que garantizar la igualdad de condiciones. Si el muchacho no come, se va de la escuela. Y si no tiene los libros, también.
P. ¿Los libros de texto también son gratuitos?
R. Así es. La bibliotecaria de aula es quien se encarga de que en la clase estén todos los libros que se requieren en cada nivel.
P. ¿Qué alternativas tienen los chicos al terminar la educación básica?
R. En educación media, de 12 a 17 años, hay dos alternativas: el Liceo Bolivariano o las Escuelas Técnicas Robinsonianas. En el liceo también se están produciendo cambios. Antes, el muchacho, al saltar de sexto a séptimo grado, pasaba de tener una maestra a 12 profesores, y nosotros estamos saltando de la división por asignatura a la construcción por áreas de conocimiento. Y del manejo del programa y del libro de texto, al trabajo en proyecto. Todo ello requiere un nuevo tipo de profesorado.
P. ¿Eso significa que van a revisar la formación de los docentes?
R. El profesor tiene que responder a las nuevas necesidades. Eso significa actualizar al maestro que está en ejercicio y establecer nuevos currículos para la formación de los nuevos docentes. La Universidad Pedagógica El Libertador es la encargada de esta formación inicial y continua. Precisamente, acabamos de reunirnos con un equipo de esta universidad para decidir cuál es el nuevo perfil del maestro que queremos. Por ejemplo, el nuevo profesor de preescolar tiene que estar formado para educación maternal y para orientar a las madres.
P. ¿Están llegando las nuevas tecnologías a las aulas?
R. Estamos intentando tener en las escuelas laboratorios con 20 computadoras y un televisor con vídeo. Éstos los puede usar todo el mundo los fines de semana. También están los infocentros, que son espacios de tecnología con acceso a Internet que son para toda la comunidad [fuera de las escuelas]. Además, estamos utilizando unas unidades móviles de tecnología. Son camionetas dotadas con un laboratorio de informática y un laboratorio integral de química, física y biología con las que intentamos llegar a las escuelas de zonas rurales.
P. ¿Qué otras iniciativas han puesto en marcha para llevar la educación a más gente?
R. En Venezuela necesitamos darle respuesta a los excluidos históricos, a los que no empezaron a estudiar, o los que empezaron pero nunca terminaron, o los que no pudieron acceder a la universidad. Para ellos hemos creado un subsistema que hemos llamado de misiones, dividido en cuatro tramos: para la alfabetización, la educación básica, la media y el acceso a la universidad. Con este sistema una persona puede empezar por la alfabetización y llegar a la universidad. Con él hemos conseguido incorporar al sistema educativo a casi cuatro millones de excluidos y erradicar el analfabetismo en dos años. En ese tiempo hemos alfabetizado a 1,5 millones de personas. De ellos, más de la mitad siguieron a sexto grado. En total, 1,5 millones están estudiando educación media, y otros 850.000, bachillerato.
P. ¿Los cambios están llegando a la universidad?
R. Hemos creado una institución que se llama las aldeas universitarias, con las que la universidad da respuesta a las necesidades que tiene cada municipio. La idea es que cada uno de los 335 municipios tenga un espacio para la educación superior, con laboratorio, biblioteca, tecnología, talleres y espacios administrativos, y que además esté de acuerdo con las necesidades profesionales que demande el desarrollo de cada zona. Por ejemplo, acabo de estar en un municipio muy lejano de la capital, en una zona agrícola. Allí requieren ingenieros agrónomos, administradores de empresas agrícolas y, allí, cualquier universidad del país puede ofrecer una corte para prepararlos y formarlos en el sitio donde ellos están.
P. ¿Cómo se ve desde Venezuela la situación de la educación en España?
R. He seguido con atención los temas de las relaciones con la Iglesia católica y la enseñanza religiosa. En el caso de Venezuela, el principio es que la educación es laica. Respetamos mucho la educación católica, pero, como hay libertad de culto, nosotros no podemos oficializar su enseñanza en las escuelas. La educación religiosa, a nuestro juicio, corresponde a la familia y la formación ciudadana corresponde al Estado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.