El Síndic investiga si en Vic se ha hurtado información a los afectados de legionela
Salud da por controlado el brote de Osona
El brote de legionela aparecido en la ciudad de Vic (Osona), que ya ha afectado 45 personas, de las cuales dos han fallecido, será objeto de investigación por el síndic de greuges, Rafael Ribó. El síndic actuará de oficio para conocer las causas del contagio y si se ha cometido alguna irregularidad, pero también para dilucidar si la información ofrecida a afectados y familiares, así como al resto de la población, ha sido la correcta.
El Síndic ha solicitado toda la documentación sobre el caso al Departamento de Salud de la Generalitat y al Ayuntamiento de Vic. Esta demanda coincide con las primeras informaciones sobre la detección de la bacteria de la legionela en las torres de refrigeración de dos empresas de Gurb, donde existe una gran concentración empresarial. Así lo han reconocido el alcalde de Vic, Jacint Codina, y el de Gurb, Joan Roca, dos localidades prácticamente pegadas.
La consejera de Salud, Marina Geli, reconoció ayer el hallazgo de legionela "en algunas empresas de Gurb", aunque subrayó que "aún no se puede decir que fueran la causa del brote" y añadió que no hay que especular, sino tener un poco de paciencia para comprobar el origen del brote comparando las muestras de la bacteria localizada en las torres de refrigeración con las halladas en los pacientes. Geli se comprometió a explicar a la opinión pública las causas y el alcance de una infección que, según dijo, "no tendría que haberse producido". Geli comparecerá en una rueda de prensa la semana que viene, una vez que se conozcan los resultados de los análisis. La consejera afirmó que se han hecho "desinfecciones masivas en todas las torres de refrigeración" y agregó: "Tenemos la seguridad de que al menos las censadas están todas desinfectadas". Además insistió en que se "han analizado todas las torres y condensadores en un radio muy amplio para poder decir con ciertas garantías que el brote está controlado".
De las 45 personas hasta ayer afectadas por el brote infeccioso, que apareció el 27 de octubre pasado, 2 han muerto, 32 han recibido el alta médica y 11 continúan ingresadas: nueve de ellas en el Hospital General de Vic, dos en la Clínica de Vic, una en el hospital Trueta de Girona y una última en el Sant Bernabé de Berga.
En los últimos días, el número de afectados ha disminuido notablemente, ya que se ha superado el periodo de incubación de la enfermedad.
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