El diseñador Gaetano Pesce busca los sentidos a través del agua

El diseñador italiano Gaetano Pesce (1939) ha convertido una sala de gran tamaño del IVAM en escenario de una intervención que recorre los tres estados del agua, el líquido, el sólido y el gaseoso. El también arquitecto, afincado en Nueva York, pretende que el espectador se implique a través de unas propuestas que buscan "no hablar a la cabeza" sino "provocar emociones", apelando a todos los sentidos, sobre todo al gusto y al olfato.

Olía a pescado en la entrada del recorrido expositivo que se podrá ver hasta el 20 de noviembre en el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM). Más concretamente, a sopa de pescado, que era lo que se cocinaba en el centro de la sala, en la enorme marmita cuyo contenido el público puede degustar.

Es, al fin y al cabo, agua, dijo este heterodoxo diseñador de muebles, interiorista y decorador. Como lo es también el vapor que forma una cortina de niebla. Esquivándola, se llega a una estructura de tuberías metálicas recubierta de escarcha.

Muy cerca, el visitante puede estampar contra la pared globos rellenos de pintura de colores, a modo de atracción de feria. La gente, en la presentación, parecía pasárselo bien. El resultado es un enorme lienzo en constante modificación que enmarca los estallidos de la pintura disuelta en el agua.

Pesce dijo que no es ningún especialista en el agua ni en su representación o simbología. Se ha "comportado como un curioso" para elaborar una instalación que no tiene como objetivo principal atraer y atrapar "lo visual" del espectador. "He tenido voluntad de hablar a todos los sentidos: al tacto, al gusto, al olfato; también a la vista, claro", agregó. El diseñador explicó que los recuerdos se hacen más nítidos si los desencadena un sabor, un olor. Los estímulos visuales han llegado a un punto tal de saturación que resulta más complicado asociarlos a un recuerdo en concreto. No sucede lo mismo con "un olor", por ejemplo, que de inmediato "rememora el pasado más remoto", al tiempo que provoca una fuerte emoción, añadió.

El recorrido continúa con el sonido del agua al caer. Diversos dosificadores regulan la cadencia de las gotas que recogen los cubos. Rodeándolos, sillones y sillas de peculiares formas diseñados por Pesce. Yendo hacia la escalera, se encuentra el agua que pretende cuajar en nieve. La parte superior de la sala, dedicada a la higiene, contiene un campo de espuma que llega hasta las rodillas y lleva a la salida de la exposición, patrocinada por la Fundación Astroc.

En la elaboración de los murales que decoran la sala han participado los artistas valencianos Cari, Pau Noguera y Benito Mayor.

La muestra H2O "no tiene ninguna voluntad de coherencia, como sucede en el arte tradicional o monolítico, sino que está compuesta por una serie de anotaciones", aclaró Pesce. El diseñador señaló que el 50% de las piezas de la exposición ya "estaba hecho" y la otra mitad empezó a realizarse ex profeso para el IVAM el pasado miércoles.

La directora del museo, Consuelo Ciscar, comentó que la muestra H2O viene a apoyar las actividades de la tercera edición de la Bienal de Valencia, que, organizada por la Generalitat valenciana, comenzará el 24 de septiembre con el lema central del agua. El Gobierno valenciano, presidido por el PP, ha convertido la reclamación del agua del trasvase del Ebro en uno de los ejes de su política. A esto se une la celebración de la Copa del América en 2007, lo que se traduce en otras exposiciones y actos previstos sobre el agua.