Crece el rechazo en EE UU a la gestión de Bush en Irak

Tras una de las más sangrientas semanas para las tropas estadounidenses en Irak, un 61% de los ciudadanos de EE UU desaprueba la forma en la que el presidente George W. Bush está manejando la guerra en aquel país árabe, según una encuesta que publica esta semana la revista Newsweek. Un 34% apoya su gestión del conflicto, el índice de aprobación más bajo del presidente, que por primera ha descendido por debajo del 40%.

Un 50% de los encuestados considera que EE UU está perdiendo terreno en sus esfuerzos para instaurar la democracia y la seguridad en Irak, frente a un 40% que cree que EE UU está haciendo progresos.

Mientras que un 26% de los encuestados se muestra favorable a mantener un amplio número de tropas en el país árabe el tiempo que fuera necesario, hasta alcanzar los objetivos de EE UU, el 38% se pronuncia a favor de que los militares estén menos de un año; un 13% dice que como máximo dos años más y un 12% considera que los uniformados deberían regresar ya a casa.

A su vez, Bush alcanza su cota más baja de popularidad con un 42%, y un 51% de los ciudadanos considera que está haciendo mal su trabajo como presidente. Durante su primer mandato, y en el primer mes tras los ataques del 11-S, el jefe de Estado norteamericano llegó a sobrepasar el 88% de aprobación a su gestión.

Un 54% de los ciudadanos se manifiestan ahora insatisfechos con cómo están yendo las cosas en EE UU, siempre según los datos de Newsweek. Y algo menos de un tercio se definen satisfechos. El sondeo de la revista semanal se realizó entre los pasados días 2 y 4, y tiene un margen de error de cuatro puntos arriba o abajo.

Irak sigue siendo uno de los quebraderos de cabeza de la Administración Bush. Un informe confidencial destinado a altos cargos del Pentágono, y del que se hacía eco ayer The New York Times, daba a conocer la existencia de un plan para reducir gradualmente entre 20.000 y 30.000 el número de efectivos estadounidenses sobre el terreno la próxima primavera si las condiciones lo permiten, según dijeron tres altos funcionarios del Departamento de Defensa la semana pasada.

Reducciones sustanciales

El máximo responsable del Ejército de EE UU en Irak, el general George W. Casey, informaba la semana pasada de que se podrían hacer "algunas reducciones sustanciales" de tropas para la primavera y el verano si el proceso político en Irak seguía la senda marcada y las fuerzas iraquíes asumían más responsabilidad en la seguridad del país. Aun así, el informe advierte de que es muy posible que el Pentágono tenga que mantener el nivel de los ya existentes 138.000 uniformados en Irak durante el año 2006 si la seguridad y el escenario político iraquí no favorecen una retirada de tropas.

Pero antes de hablar de retirada, el número de soldados americanos en Irak será temporalmente incrementado en diciembre para dotar de seguridad a la eventual celebración de las elecciones iraquíes, tras la aprobación de la Constitución en el referéndum previsto el 15 de octubre. Toda esta composición dependerá de si finalmente la Carta Magna está lista en su fecha límite: el próximo lunes 15 de agosto.