Siete comunidades limitan el agua de riego para asegurar el consumo humano

La sequía afecta ya a media España. Siete comunidades (Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia, Castilla-La Mancha, Andalucía y Extremadura) han restringido el agua a sus cultivos para garantizar el abastecimiento al consumo. La cuenca del Segura, Huesca y Cataluña están en la peor situación y ya han limitado el uso de agua en jardines, piscinas y fuentes. El Ministerio de Medio Ambiente asegura que el consumo está garantizado hasta septiembre, pero reconoce que la situación se agravará aún más si, como es previsible, la sequía se alarga. La última sequía duró de 1990 a 1995.

El Informe sobre la política de gestión de sequías que ayer presentó el Gobierno señala que, desde septiembre de 2004, España ha recibido un 50% menos lluvias de lo que es normal. Aunque las predicciones a largo plazo no son fiables, Medio Ambiente no espera lluvias antes de septiembre. El ministerio no habla de sequía hidrológica (falta de agua) sino meteorológica (falta de lluvia). En otoño comienza el año hidrológico y puede que vuelva a llover. Aunque no es lo más probable.

El director general del Agua, Jaime Palop, afirmó que la situación "tiene mala pinta". España sufre sequías periódicas que afectan fundamentalmente a la vertiente mediterránea. La última se prolongó entre 1990 y 1995 y la anterior de 1979 a 1982. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, pidió de nuevo a los ciudadanos que ahorren agua.

Como en sequías precedentes, la diferencia entre el Atlántico y el Mediterráneo es enorme. Los embalses están 59,2% de su capacidad, pero hay grandes diferencias según la zona. Los del Segura están al 21,7%; los de Asturias y Cantabria, al 86,6%. En las Cuencas del Norte (Galicia y norte de León) hay incluso un 98% más agua que en septiembre de 2004. En Asturias y Cantabria hay un 55% más de agua embalsada.

Lo peor comienza en Huesca, donde hay pueblos que desde mayo se abastecen con cubas. Las piscinas públicas en Huesca han abierto sin agua. La Junta de explotación del alto Aragón ha obligado a cambiar cultivos y ha reducido las dotaciones a un tercio de lo normal, según el informe.

Primero, la agricultura

En una sequía, lo primero que se recorta es la agricultura, que consume un 75% del agua. Lo mismo ocurre en regadíos de Extremadura, Cataluña, Valencia y Murcia, por lo que el presidente de la Federación de Comunidades de Regantes, Andrés del Campo, pidió nuevos trasvases.La Cuenca del Tajo está en alerta. Los embalses de cabecera están tan mal que el próximo trasvase el Segura lo tendrá que autorizar el Consejo de Ministros. El informe recoge que el Segura tendrá "restricciones al riego del orden del 75%".

La mancomunidad de canales del Taibilla, que abastece a 77 municipios de Albacete, Murcia y Alicante, anunció la restricción de agua en piscinas, que prohibirá las duchas en las playas y que bajará la presión del agua del grifo. Cataluña ha limitado el consumo a 890 municipios. El consejero valenciano de Agricultura, Juan Cotino, anunció la inversión de 750 millones en obras para ahorrar agua. Desde ayer, los regantes de Elche sólo tienen agua ocho minutos al día, informa Rebeca Llorente.

El Canal de Isabel II, que abastece la Comunidad de Madrid, iniciará una campaña para reducir el consumo más de un 5%. LA situación es mejor en Andalucía, pero aun así tiene problemas de riego en Cádiz y Jaén.

El Gobierno ha aprobado 45 obras de emergencia por valor de 371,61 millones, que incluyen desde la puesta en marcha de desaladoras en Murcia y Alicante hasta la apertura de pozos de sequía para garantizar el consumo.

El PP criticó la gestión de Narbona. "La principal causa del problema es la sequía inversora del ministerio. Se sabía desde septiembre de 2004 que el ciclo era malo y el Gobierno no hizo nada para adelantarse", afirmó la portavoz del PP en la Comisión del Medio Ambiente del Congreso, María Teresa de Lara. Narbona ha acusado al anterior Ejecutivo de no haber hecho nada. "Las sequías se atajan sobre todo antes de que lleguen, y en los últimos ocho años no se ha hecho nada para prepararnos", afirmó el jueves tras la derogación del trasvase.