"Nunca aceptaremos un Estado independiente"

El presidente de Moldavia, Vladímir Voronin, un comunista que se ha subido al carro de las revoluciones postsoviéticas, agradece al ucranio Víktor Yúshenko su búsqueda de una salida para el problema del enclave secesionista del Transdniéster. Sin embargo, Voronin tiene un interés más inmediato en bloquear económicamente a los separatistas que en el plan, basado en la democratización, de su homólogo ucranio, según afirma en esta entrevista a EL PAÍS.

"Ucrania nos puede ayudar, sobre todo desde el punto de vista económico; es decir, cerrando esa frontera separatista no controlada con el Transdniéster para que no haya contrabando. El régimen separatista caerá cuando le privemos de la sustancia económica que lo alimenta. Los separatistas aguantan porque tienen el apoyo de ciertos círculos de Rusia", afirma Voronin.

¿Qué opinaría de una revolución naranja en el Transdniéster? "No estamos en contra de que las fuerzas internas, hartas de lo que se cuece allí durante tantos años, expresen su posición, pero en el Transdniéster hay un sistema de seguridad peor que en los años treinta en la URSS. Si alguien dice allí lo que piensa, desaparece", afirma. "Es el terror, y la democracia no llegará por sí misma". El presidente considera "ineficaz" el marco de negociaciones en el que se ha intentado resolver el problema (Chisinau, Tiráspol, Kiev, Moscú y la OSCE). Ahora plantea "incluir a EE UU, la UE y Rumania en calidad de observadores".

Voronin explica que su objetivo es convertir el Transdniéster "en una región autónoma como la que tienen los gagauzos" (una comunidad local de origen turco) y señala que la autonomía de Crimea, en Ucrania, podría ser un modelo. "Estamos elaborando un proyecto de ley sobre el estatus del Transdniéster", aclara. En 2003, Voronin rechazó el plan ruso que presentó Dmitri Kosak, el allegado del presidente Putin, porque "preveía un acuerdo entre dos sujetos federales, lo que implicaba reconocer al Transdniéster como Estado y eso no lo podemos aceptar ni lo aceptaremos nunca". "Si Rusia nos quiere ayudar a resolver el problema, lo primero que debe hacer es retirar sus armas y soldados del Transdniéster y entonces el régimen separatista se quedará sin protección política. La presencia rusa es un factor de apoyo a los separatistas".

El plan Kosak preveía la presencia de las tropas rusas en el Trandsniéster hasta 2020. "Rusia no tiene razones geoestratégicas para permanecer en el Transdniéster. "Con Rumania y Ucrania en la OTAN, el paraguas de esta organización cubrirá también a Moldavia". La política europea es la principal orientación de Voronin. Al calor del ingreso de Rumania en la UE, Chisinau ha firmado un plan de acción con Bruselas y se dispone a recibir a un embajador de la UE. De momento, Moldavia es un país pobre y exportador de emigrantes, donde el sueldo medio mensual es de unos 100 euros.